La enfermedad celiaca es, a veces, difícil de diagnosticar. Muchos niños pasan meses con síntomas diversos que se achacan a otras dolencias, hasta que, por fin, se hace un diagnóstico certero.
En ese momento, por un lado, supone cierto alivio saber que le pasa a nuestro bebé, pero por otro lado se abre todo un mundo de incertidumbres; ¿Qué puede comer? ¿Cómo puedo evitar un brote? Si, además le sumamos que llegamos a las fechas navideñas, una época en la que son frecuentes las comidas con menús especiales, vamos a comer fuera de nuestra casa, con la familia, con amigos y es difícil controlar que comen los peques nuestras alarmas se dispara.
¿Qué es la enfermedad celiaca?
La enfermedad celíaca es una enfermedad de base inmune que consiste en una intolerancia a las proteínas del gluten del trigo, cebada, centeno y parece ser, que también de la avena que se da en personas con cierta predisposición.
Curiosamente se da mas en mujeres que en hombres, en concreto la padecen el doble de mujeres que de hombres.
Esta intolerancia provoca que la mucosa del intestino sufra una atrofia importante. De forma que gran parte de las sustancias que se deberían absorber en esa mucosa dejan de absorberse.
La enfermedad celiaca no tiene cura. Su único tratamiento consiste en llevar una dieta sin gluten, para intentar que la mucosa intestinal sane en lo posible.
El gluten no tiene ningún valor nutricional, pero es el responsable de la elasticidad de la masa de harina, lo que da la consistencia esponjosa de panes y masas horneados.
Dieta libre de gluten
En estas fechas navideñas es habitual realizar comidas diferentes, con platos especiales,mas elaborados o festivos. Es habitual salir a comer fuera de casa o recibir visitas en la nuestra. Si tenemos un niño celiaco el menú se complica un poco y es importante que no haya demasiada diferencia entre lo que le preparamos al niño celiaco y al resto de los niños.
Comida en casa
Si vas a comer en tu casa o en la de algún familiar es fácil comentarle las precauciones y diseñar una dieta acorde para el niño celiaco.
Mejor productos naturales que manufacturados
Ten mucha precaución con los productos importados. Un mismo fabricante puede variar los ingredientes de sus productos dependiendo del país donde se consuman.
Ensaladas, pescados y carnes a la plancha, huevos, tortillas naturales, postres naturales, frutas son aptas para celiacos. Una presentación atractiva hará que al niño celiaco le resulten apetecibles.
Cualquier harina que utilicéis debe estar certificada por FACE (Federación de Asociaciones de Celiacos de España). Esto te asegura que el molino en el que se procesaron no se contamina usando otros cereales, como el trigo.
Arroz, maíz o tapioca son aptos para dietas sin gluten
Mucho cuidado con el embutido, asegúrate de que está libre de gluten. Mejor comprarlo entero y loncharlo en casa, con un cuchillo limpio que debéis limpiar al cambiar de embutido.
Si la comida incluye entremeses empanados o rebozados mejor hacerlo con harinas o pan rallado sin gluten, copos de puré de patata para rebozar, empanar o para espesar las salsas.
Puede tomar patatas fritas, siempre es importante asegurarse que tanto la sartén como el aceite con el que se fríen están limpios. Cualquier plato a la plancha se debe elaborar en sartenes limpias, con aceite limpio.
Separa claramente los alimentos sin gluten del resto. Ten cuidado con los cubiertos y la vajilla, es importante que no se contamine la que vas a utilizar para los alimentos sin gluten con cualquier otro ingrediente.
- Compra el pan y la bollería especiales sin gluten.
- Puedes elaborar la bollería o los dulces en casa, con ingredientes sin gluten.
- La pasta debe ser, igualmente, apta para celiacos.
- Refrescos y zumos son, en general, aptos para celiacos.
- Incluso existen turrones y roscón de reyes aptos para celiacos.
Puedes preparar tapas de queso, jamón serrano, latas de conservas (mejillones, zamburiñas, berberechos, etc). Con la precaución de revisar los ingredientes, sobre todo en caso de que las conservas tengan algún tipo de salsa.
En un restaurante
Informa al camarero de que un comensal es celiaco y necesita una dieta especial
Asegúrate de cómo se elaboran los platos artesanales que ofrezca la carta del restaurante.
Insiste en la limpieza tanto de la plancha o satén donde se elaborarán los alimentos sin gluten como en la importancia de que el aceite que se utilice sea limpio y no se haya utilizado en ningún otro plato.
Existen muchos restaurantes asesorados por FACE, para elaborar una dieta sin gluten con garantías. En estos casos el restaurante exhibirá un logotipo de restauración diseñado especialmente por FACE en lugares visibles.