La oxiuriasis es una enfermedad parasitaria muy común en los niños. Para aquellas madres que no saben de que se trata, es cuando se encuentran lombrices en el intestino del niño.
Se inicia cuando el niño ingiere los huevos de las lombrices, los cuales se alojan y maduran dentro del intestino y posteriormente estas mismas lombrices se reproducen en el intestino.
El contagio de la oxiuriasis se produce principalmente por la boca. Las formas más comunes de contagio son:
- Alimentos mal lavados: las verduras y hortalizas pueden contener estos huevos, se deben lavar antes de su consumo, sobretodo cuando el consumo va a ser sin cocción.
- Llevarse a la boca objetos infectados: juguetes de niños infectados pueden contener los huevos, que se transmiten cuando el niño infectado se rasca el ano y posteriormente lleva los huevos a través de sus uñas a los objetos que toca.
- Tocar objetos infectados y luego llevarnos las manos a la boca: trasladando los huevos que se encuentran en los objetos hacia nuestro organismo.
- No lavarnos las manos luego de jugar en parques: en los parques pueden estar gatos y perros que no tienen dueño y por ende desparasitados, ellos dejan los huevos de las lombrices en la tierra y arena de los parques donde los niños suelen jugar.
- Compartir ropa de niños infectados
- Por autocontagio: un niño infectado, se rasca el ano y se lleva la mano a la boca, en sus uñas llevará también los huevos autocontagiándose.
Los principales síntomas de que presentamos lombrices en el intestino son: escozor en el ano, rechinar los dientes, dormir mal, presentar fiebre, dolor de estomago, inapetencia, cansancio y malestar general.
La primera medida a tomar es llevar al niño al pediatra para su diagnóstico e inicio del tratamiento con medicinas específicas, siendo también importante tomar las siguientes precauciones:
- Lavar bien los alimentos y cocer bien los alimentos, sobretodo las carnes.
- Bañar al niño diariamente.
- Lavarle el ano constantemente con agua y jabón, sobretodo luego de defecar.
- Si usa pañales, usar pañitos húmedos desechables, evitar el uso de esponjas porque allí pueden quedar huevos que producirán el contagio.
- Muda la ropa del niño diariamente y al lavarla hazlo separada del resto de la familia y utiliza agua caliente para ello.
- Cambiar la ropa de cama frecuentemente.
- Lavar las manos del niño constantemente y mantener sus uñas limpias y bien cortadas.
- Usar enterizos para dormir, pijamas de una sola pieza para evitar que el niño se rasque el ano mientras duerme y pueda autocontagiarse.
Fuente: Mamas y Bebes Blog
Esto es muy bueno mi hija se lo aprendió muchas gracias