Antes de la maternidad la vida se siente diferente y los hijos de los demás también se ven como algo lejano. Si tenías sobrinos antes de ser madre, es posible que cuando sus padres tuvieran que cambiar los pañales o limpiarle los mocos te daba asco verlo y no te podías imaginar enes situación… ¡de hecho pensabas que eso nunca te pasaría a ti!
Pero cuando tienes hijos todo cambia. Comienzas una nueva etapa que está acompañada de pequeños paquetes de alegría que te dan la vida, literalmente. Tu forma de ver el mundo cambia de maneras inimaginables y de repente, te ves haciendo cosas que nunca antes te imaginaste que serías capaz de hacer. Cosas que se convierten en rutina, que se vuelven normales para ti. De repente, te ves a ti haciendo esas cosas que nunca antes pensaste que harías…
A continuación vamos a hablar sobre algunas de las cosas que te daban asco antes y que ahora se han convertido en algo totalmente normal para ti… (y quizá no sea tan normal para las personas que están a tu alrededor):
- Oler si una mancha marrón es caca o chocolate
- Cambiar pañales que han manchado de caca toda la espalda del bebé
- Limpiar mocos a todas horas de cualquier color y tamaño
- Analizar y oler la caca para ver si es normal
- Querer ver la caca de tu bebé a toda costa si es otra persona quien le cambia el pañal
- Llenarte de babas
- Tener vómito en la ropa sin darte cuenta
- Limpiar vómitos a cualquier hora del día
- Limpiar mocos con tu camiseta o con tu propia mano
- Comer los restos de comida de tu bebé… aunque estén llenos de babas
- Que te estornuden en la cara
¿Te suenan todas estas situaciones? Seguro que podrías añadir alguna más…