Si tienes una amiga que acaba de ser mamá, estarás deseando hacer cosas por ella, visitarla y ayudarla en todo lo que sea posible. El apoyo de los familiares y los amigos es fundamental para las mujeres cuando tienen un bebé. No solo para las primerizas, para cualquier mujer supone todo un reto tener un hijo. Son muchos los cambios que se producen con la llegada de un bebé.
Cambios físicos, cambios en las rutinas, en el estilo de vida y a todo ello, hay que sumarle un importante desajuste hormonal que lo complica todo aún más. Por ello, es muy importante saber qué es lo que puedes hacer por tu amiga que acaba de ser mamá. Porque en muchas ocasiones, de una forma totalmente inocente y con la mejor de las intenciones, se pueden provocar situaciones poco apropiadas para una reciente mamá.
¿Quieres ayudar a tu amiga que acaba de ser mamá?
Seguramente estarás deseando visitar a tu amiga en el hospital, conocer a su bebé al que vas a querer muchísimo y colmar de atenciones a la reciente mamá. Al igual que otras muchas personas cercanas, familiares y amigos, que pueden llegar a convertir la estancia en el hospital en un pequeño infierno. La reciente mamá con total seguridad estará agotada, dolorida y acostumbrándose a su nueva situación.
Por ello, antes de lanzarte con todo tu cariño al hospital a hacer una visita, recuerda que tienes todo el tiempo del mundo para disfrutar de tu amiga y su bebé. Planifica muy bien esa primera visita, es preferible esperar a que mamá e hijo estén en casa y que al menos hayan pasado los primeros días de adaptación. Cuando vayas de visita, no olvides ir preparada para ayudar a tu amiga, ¿quieres saber cómo?
Lleva comida preparada
Los primeros días de adaptación en casa son complejos, porque todo el tiempo lo reclama y necesita el bebé. Con toda esa atención, lo normal es que los recientes padres no tengan tiempo para comer debidamente. Mucho menos para cocinar y elaborar platos nutritivos que les ayuden a llevar el cansancio diario. Cuando vayas de visita, lleva algunos tuppers con comida casera, platos de cuchara, que se puedan conservar varios días y que resuelvan las comidas de tu amiga durante unos días.
Encárgate de algunas tareas domésticas
La limpieza es algo que queda en segundo plano cuando llegas a casa con un recién nacido. Hasta que no pasan unos días y la familia se adapta a las nuevas rutinas, es difícil poder hacerse cargo de todas esas tareas domésticas. Lo que añade estrés a los recientes padres y madres, ya que ven cómo se acumulan las tareas, además del cansancio y la falta de tiempo.
Ve preparada para ayudar con las tareas domésticas, quizá tu amiga lo rechace de entrada por apuro. Pero si de verdad quieres hacer algo por ella, muestra tu deseo de ayudar con la casa y seguro que te lo agradecerá. También puedes ofrecerte a realizar algunos recados, como ir a la farmacia, al supermercado o asegurarte de que tiene suficientes pañales y toallitas.
Cuida del bebé para que tu amiga pueda cuidar de sí misma
El tiempo personal desaparece cuando llega un recién nacido a casa, a no ser que tengas ayuda constante para encargarse del bebé cuando tú tienes que encargarte de ti misma. Seguramente tu amiga necesitará ducharse tranquilamente, arreglarse el pelo, dormir sin interrupciones o simplemente no hacer nada durante un rato. Encárgate del bebé para que tu amiga pueda tener algo de tiempo para ella.
Quizá tu amiga se encuentre un poco sobrepasada con esta nueva situación, por lo que es posible que se muestre irritable o poco amigable. Lo mejor que puedes hacer para ayudarla es ser comprensiva con ella, escucharla, intentar ayudarla en lo que necesite y mostrarte dispuesta a estar ahí para lo que necesite. En poco tiempo se adaptará a su nueva rutina y tú podrás disfrutar de tu amiga y su maravilloso bebé.