¿No estás segura de que tu hijo esté listo para comenzar a usar el orinal? Vamos a descubrir juntas los los signos emocionales y físicos clave a tener en cuenta.
Cuando llega el momento de aprender a ir al baño puede ser estresante tanto para los niños pequeños como para los padres. Pero también puede ser una experiencia realmente positiva y gratificante. El nivel de interés de un niño pequeño es un indicador clave de preparación.
Una cosa que no puedes controlar es cuándo va a ir al baño tu niño. Por lo tanto, asegúrarte de que tu niño pequeño esté listo para tomar el control de esta parte de su desarrollo. El entrenamiento para ir al baño es extremadamente estresante para los padres, así que recuerda hacer ejercicios de respiración cuando te sientas frustrada por no poder controlar la situación. Las cosas no suelen salir a la primera ni como una quisiera que salieran.
El Dr. Fran Walfish, psicoterapeuta familiar y de relaciones de Beverly Hills, autor de The Self-Aware Parent , psicólogo infantil experto habitual en The Doctors, CBS TV, y coprotagonista de WE tv, advierte que «lo más importante es tener una actitud correcta. Estás ahí para guiar y alabar cada avance hacia su independencia, pero no para presionar ni forzar«.
Ha desarrollado una conciencia de las sensaciones corporales
Una vez que los niños hayan desarrollado un sentido de conciencia en torno a sus sensaciones corporales, podrán saber cuándo necesitan ir al baño. Debes ayudar al pequeño a aprender a escuchar su cuerpo, cuando su cuerpo le pide que vaya al lavabo. Al principio, cuando hayan comenzando a aprender a ir al bañoes probable que no les de tiempo a llegar hasta el baño. Debes estar preparada para accidentes y tener presente que tocará limpiar más de una vez. Es normal y muy habitual. Debes enseñarle a escuchar su cuerpo para que le de tiempo a llegar hasta el baño.
Permanece seco por más tiempo
Una vez que tu hijo pueda mantener el pañal seco durante más de 2 horas o más, es posible que esté listo. La capacidad de mantener el pañal seco durante períodos prolongados es un buen indicador de que el cuerpo de tu hijo está madurando y tiene control sobre cuándo hacer sus necesidades. En este momento es bueno educar al niño a ir al baño cada dos horas.
Curiosidad e interés
Una señal de que tu hijo está listo para comenzar a aprender a ir al baño es que se interese por el orinal. Quizás te siga hasta el baño, o coloque sus juguetes en el orinalito, o comience a pedir usarlo o hacer preguntas sobre el orinal. Elisa Cinelli, experta en la crianza de los hijos, asegura que la mejor forma de que el pequeño aprenda es cuando se interese por él. Lo mejor es dejar que vaya al baño contigo, ponerle el orinal cerca de ti para que te imite y dejar que el orinal esté siempre accesible para que sepa que pueda usarlo siempre que quiera.
Como madre, es posible que te sientas cohibida por tener compañía en el baño, pero los niños aprenden mediante la observación. Permitirles que te vean usar el baño despertará un nivel de curiosidad e interés que lo llevará al deseo de probarlo por su cuenta. Una vez que la pelota comienza a rodar, puedes mantener a tu hijo interesado creando una rutina, proporcionándole un orinal de tamaño adecuado e incluso dejándole que te ayude a elegir su propia ropa interior como incentivo.
No le temas al orinal
Puede haber muchos miedos en torno al uso del orinal. Algunos miedos comunes son las caídas y el hecho de tener que sacar las cacas. Si bien puede parecer una tontería, muchos niños, en particular los varones, pueden asustarse y/o ponerse tristes cuando tienen que tirar la caca. Es recomendable que hagan pipí sentados, aunque sean niños. Si un niño está sentado para orinar, la caca puede salir de forma natural.
Si notas que tu hijo tiene miedo a hacer caca en el orinal, forzarlo puede provocar estreñimiento o miedos irracionales. Déjele defecar en el pañal pero anímalo a que sigan en el baño.
Deja que tu hijo te ayude a tirar la cadena para que sienta una sensación de control y anticipación del sonido fuerte.
Tiene las habilidades motoras físicas necesarias
Un niño debería poder subirse/bajarse los pantalones y subirse y bajarse del orinal cuando comience a aprender a ir al baño.
Puede seguir instrucciones sencillas
Algunos ejemplos de instrucciones son bajarse la ropa y luego subirse al inodoro. Que se siente durante unos minutos para asegurarte de que haya terminado y luego se limpie bien. Obviamente, puedes ayudar a tu hijo pequeño con muchos de estos pasos, pero debe ser consciente de las instrucciones que debe seguir en cada momento.