Los valores es la parte fundamental en la educación de nuestros hijos. Si ellos los niños no pueden llegar a desarrollar la destreza de comprender o valorar mucho mejor todo lo que les rodea, y como consiguiente pueden llegar a adaptarlos a su entendimiento y ser mucho más felices.
Valores hay muchos, y se pueden practicar todos porque son fundamentales para la crianza, ya que crecerán en un entorno sano y humilde. Son los padres los que deben de destacar principalmente esos valores y hacérselo ver y comprender. Si los padres son participes de seguir un estereotipo de cualidades, los niños seguirán su mismo ejemplo.
Valores fundamentales que todo niño debe aprender en su vida social
Poco a poco, según van creciendo nuestros hijos, se van dando importancia más a unos valores que a otros, igual pasa a los que somos educadores. Cuando son pequeños aprenden el valor de amor, el respeto y la gratitud.
A medida que se van incorporando con el resto de la sociedad sus valores aumentan y ya comienzan a ser más humanos, dónde aparece la sociabilización y la cultura. Bajo este punto cabe de desarrollar un montón de puntos que pueden derivar a un estado filosófico, dónde habría conductas y acciones que no tendrían que encajar como el egoísmo y el respeto.
- La responsabilidad: este valor es aprendido desde muy pequeños y a lo largo de la vida se sigue ejemplarizando. Implica tener conciencia de lo que se hace y cuál son las consecuencias a lo que va a derivar, ya sea bueno o malo. Cómo punto importante hay que valorar y responsabilizarse de las acciones.
- Generosidad: es un valor que se intenta enseñar desde muy pequeños. Aunque no resulta ser aprendida desde edades muy chiquitinas al no poder desarrollarlo de forma natural, pero sí dependiendo de la edad habría que respetarlo. No obstante, este valor no se deja de lado, hay que seguir manteniendo esta enseñanza, ya que su falta crea personas egoístas y egocéntricos. Compartir la generosidad crea que otras personas también lo sean.
- Humildad: es una cualidad fundamental para poder admitir con empatía que todas las personas son iguales unas con otras y por lo tanto deriva al respeto. Para comenzar a ser humildes hay que primero mirarse a uno mismo y observar que tenemos cosas buenas y cosas malas, que nadie es perfecto. Por lo tanto hay que valorar lo bueno de las demás personas y no mirar solo sus defectos.
- Gratitud: sentirse agradecido es el mejor detalle para poder ser una persona completa, mucho más feliz y con mayor autocontrol. Es importante enseñar este valor para que sientan gratitud por todo lo que les rodea y también lo sientan con todas las personas que dedican su tiempo y esfuerzo por las demás personas. El amor de los padres supone mucha inversión y tiempo y por este medio se puede empezar a enseñar por dónde comienza la gratitud.
- Honestidad: esta cualidad hace que se cree un vínculo con la sinceridad y la humildad. Hay que empezar por mostrar que nadie es perfecto, que somo seres humanos que cometemos errores y se puede aprender a rectificar que nos hemos equivocado, sin usar las mentiras. Usar la mentira hará que las personas no terminen de ser felices y más auténticos.
- Autoestima: este valor forma parte de la templanza de una persona, hace que nos respetemos y valoremos como somos. El amor propio debe predominar en una persona y sobre todo en un niño. No dejar ni sentirse inferior a los demás y ni permitir que nadie nos pisotee. Son buenos los halagos o elogios de los padres, pero hay que tener buen uso de esta herramienta y usarla de forma adecuada para no crear niños con un alto orgullo.
- Empatía y amistad: es fundamental sociabilizarse y tener amigos. Es una parte importarte de poder tener apoyo extra además de la familia y por lo cual hay que luchar. Los amigos de verdad hay que ganarlos y también ellos tienen que ofrecer sus mejores valores. La amistad hace que se compartan experiencias, se de apoyo y se esté ahí para todo los que se necesita.
No es suficiente sentarse junto a tu hijo y decir qué valores tiene que ejemplarizar, estas cualidades se crean enseñando y asesorando con hechos y acciones. Los padres somos el mejor modelo como lección de la vida. Para saber mucho más sobre este tema puedes leer sobre «los valores que transmiten las películas Disney» o los «libros recomendados para adolescentes sobre valores«.