Aunque en muchos casos no se le da la importancia que merece, para un hijo adolescente, que le deje la novia es un duro golpe difícil de asimilar. Las decepciones amorosas son complicadas y en la adolescencia mucho más, ya que es una etapa de cambios, de inseguridad y de búsqueda de la propia personalidad. Pasar por una situación así, sin tener las herramientas necesarias para gestionarlo, puede resultar traumático para cualquier joven.
Cuando una persona decide poner fin a una relación, aquel que es dejado no puede sentirse menos que rechazado. Las dudas de un adolescente, pueden llevarle a pensar que no es suficiente, cuando quizá tan solo se trata de una cuestión de juventud. Por ello, es fundamental mantener una buena comunicación con los hijos desde la infancia. Ya que, llegados a este punto necesitarán una persona de confianza con la que poder desahogarse.
La primera decepción amorosa
El primer novio o la primera novia es algo que nunca se olvida, un paso hacia la madurez por la que todo el mundo debe pasar en algún momento de la vida. Algunas personas tienen su primera pareja siendo adultos, sin embargo, lo más habitual es que las primeras relaciones amorosas surjan en la adolescencia. El amor de juventud es especial, es algo que puede marcar el futuro de las relaciones afectivas.
Por ello, es esencial que los padres y las madres dediquen tiempo a hablar con los hijos sobre el amor, las relaciones, la salud sexual y por supuesto, las rupturas. Aunque puedan llevar una relación bonita y duradera, lo más normal es que una relación adolescente termine en algún momento. Hoy en día no es tan común tener una sola relación como ocurría antiguamente.
Esto no significa que las relaciones sean menos reales que hace algunas décadas, sino que los jóvenes son más conscientes de las muchas oportunidades que da la vida. Los chicos y chicas saben que pueden elegir, tienen la capacidad de decidir con quién quieren compartir su tiempo. Eso es algo maravilloso que deben aprender desde pequeños. Pero no se debe olvidar dotar a los chicos de herramientas para gestionar una ruptura amorosa.
Cómo ayudo a mi hijo adolescente si le deja la novia
No siempre es fácil saber cómo actuar ante ciertas circunstancias, porque generalmente, a los padres les cuesta mucho ver a sus hijos como adolescentes, como personas adultas. Sin embargo, es algo para lo que uno se debe preparar, porque así podrás enseñar a tu hijo a tener una relación sana y ayudarle llegado el caso de que le deje la novia.
¿Cómo puedes ayudar a tu hijo en esta situación?
- Empatiza con tu hijo: Recuerda cómo te sentiste tú con tu primera ruptura, tu primera decepción amorosa y no menosprecies sus sentimientos. Aunque a ti te parezca algo poco importante, para tu hijo esto puede ser lo peor que le ha pasado nunca.
- Escúchale y deja que exprese sus sentimientos: Evita decirle que se le pasará, que no era tan importante o que la chica no le merece. Deja que se desahogue, que llore, que suelte toda su frustración. Es fundamental que el chico pueda expresar cómo se siente, puesto que es el paso previo a la aceptación.
- Ayúdale a comprender por qué ha sucedido: Seguramente se estará preguntando qué ha hecho mal, por qué no es suficientemente bueno, guapo o especial. Son dudas lógicas en cualquier adolescente que ha sido abandonado por la novia. Explícale que el amor es así, que uno no elige a quién querer. Y que aunque duele, debe quedarse con el recuerdo de todo lo vivido.
- No hables mal de la novia: No busques la culpa en la novia o en la persona que deja, seguramente tu hijo se enfadará porque aún sigue enamorado y no quiere escuchar cosas malas de esa persona tan especial.
Las rupturas son siempre complicadas, incluso aquellas que parecen inocentes por ser adolescentes. Preparar a los niños para las relaciones afectivas es fundamental, para que puedan descubrir el amor de forma sana. Sobre todo, para que puedan aceptar las rupturas como algo natural de las relaciones con otras personas.