La motricidad gruesa (acciones grandes con el cuerpo como caminar, saltar, correr…) y la motricidad fina (acciones realizadas con las manos), son necesarias para el desarrollo infantil. Las actividades para mejorar la motricidad en tus hijos pueden ser muy fáciles de hacer y además divertidas.
Por eso, a continuación vamos a comentarte algunas actividades para que hagas con tus hijos en casa y que de esta manera les estés ayudando a mejorar su motricidad, ¡jugando y sin que se den cuenta de tus intenciones de ayuda!
Construir con bloques o Lego
Los juguetes de construcción, como bloques de madera o Lego, son excelentes para desarrollar la atención, la motricidad fina y la coordinación.
Juguetes de construcción
Como alternativa a los bloques y Lego, ofrécele a tu hijo otros juguetes de construcción que tengan piezas que se enlacen, unan o hagan clic y encajen entre sí.
Carrera de huevos y cucharas
La carrera del huevo y la cuchara es una de las favoritas. Este es un juego tan simple para jugar con tu hijo y vosotros os reiréis juntos mientras practicáis esta diversidad habilidad. Para evitar que no hayan huevos rotos en tu suelo, ¡mejor que estén cocidos o que sean de mentira!
Bola de swing
Golpear una pelota en una cuerda con un bate es una de las mejores actividades para desarrollar la coordinación ojo-mano. Puede construir uno en casa con un poste de madera y una cuerda o comprar uno en línea.
Problemas de coordinación ojo-mano
A veces, los niños tienen problemas de coordinación deficiente, relacionados con la visión o el control motor. Debes estar atento a las siguientes señales:
- Torpeza
- Frustración
- Sosteniendo las cosas demasiado cerca de sus ojos
- Evitando actividades
Si crees que tu hijo tiene dificultades con la coordinación ojo-mano, habla con un pediatra, oftalmólogo u optometrista.