En varias ocasiones hemos hablado de lo importante que es una dieta equilibrada y sana en los niños. Hoy queremos darte algunas pautas, y recetas para que tus hijos e hijas consuman alimentos ricos en hierro casi sin darse cuenta. No obstante, a veces se produce la anemia, tanto la infantil, como la de las embarazadas. Puedes consultar este artículo para tener más datos sobre esta última. Pero
Y ¡ojo! Porque tan importante es consumir hierro como hacerlo de la forma correcta, complementado con los alimentos que potencian sus propiedades.
Diez alimentos ricos en hierro
Si hacemos una lista de los alimentos ricos en hierro, en general, vas a encontrar que al menos, alguno puede provocar intolerancia o alergia a tus hijos, sobre todo si son pequeños. Más adelante hemos dedicado un apartado a alimentos con hierro para bebés.
Los alimentos con más hierros son las especias como el tomillo, eneldo, tomillo, albahaca, laurel y otras, pero en cambio, como tomamos pocas cantidades no lo aprovechamos tanto. Siguiendo esa lista de diez alimentos ricos en hierro, esta sería, los mariscos de concha, pescados, cereales, yema de huevo, vísceras, verdura de hoja verde oscura, carnes, frutos secos y fruta. Pero no todos son del mismo tipo, ni tienen la misma proporción.
Aunque parezca extraño hay dos formas en las que puedes encontrar hierro en los alimentos: el que llamamos hemo, que es de origen animal, y el hierro no hemo, presente en los vegetales. El de origen animal tiene la característica de que nuestro organismo lo absorbe muy bien, aproximadamente el 25% del que contenga el alimento. En cambio, el hierro no hemo lo absorbemos peor, entre el 3 y el 10 por ciento, y depende de otros factores. Por ejemplo a veces en el mismo alimento, hay otro tipo de mineral que dificulta la absorción del hierro. Por eso es bueno, lo que tantas veces hemos oído, comer una naranja después de las lentejas, para que nos alimenten más, o no tomar leche o derivados tras ingerir espinacas.
Alimentos con hierro aptos para bebés
En los bebés prematuros, los pediatras suelen recomendar un suplemento de hierro como prevención. Esto mismo ocurre en los bebés que su madre padece o ha padecido anemia durante el embarazo o en los casos de lactancia artificial. Las leches infantiles incorporan un complemento de hierro.
Los bebés entre los 9 y los 24 meses son más propensos a tener anemia ferropénica, es decir la causada por la carencia de hierro. Un buen desayuno puede ser bebida de almendra, con cereales, mucho mejor si son integrales, tienen más hierro, y no azucarados. O con unas galletas de avena.
Si quieres aumentar la proporción de hierro en su alimentación, debes hacer las tortillas solo con la yema. Esto es porque si utilizas el huevo entero, la proporción de hierro desciende a la mitad. Debes tener cierta moderación en este caso ya que yema es rica en grasa y colesterol. Normalmente el huevo se introduce en la alimentación sobre los 10 meses.
Todos los tipos de carne tienen hierro de origen animal, fácil de absorber. Inclúyelas en la dieta de tu bebé, limitando las carnes rojas y prefiriendo siempre cortes magros. La fruta con más hierro es el kiwi, pero no se recomienda incluirlo hasta los 6 años. Mientras tanto incluye todo tipo de cítricos, y ciruelas.
A todo esto, en los niños y bebés hay que estar atentos a los parásitos intestinales, es bueno hacer un análisis de heces rutinario.
Algunas recetas divertidas para niños
Para los niños, tan importante como el sabor es la presentación del plato. Así que si tienes algo de tiempo dedica unos minutos a la decoración con pipas de calabaza, pistachos fresas, o cualquier otro ingrediente que pueda resultar muy llamativo. Aunque sea para una simple hamburguesa, es mejor si está hecha con una sonrisa.
Una receta muy fácil son las tostadas de habas y guisantes. Puedes cocerlas, o refreirlas un poco en la sartén. La idea es que luego queden trituradas y puedas ponerlas sobre una tostada, como una crema verde de extraterrestres. Añade cúrcuma, y el sabor es espectacular.
Las lentejas, garbanzos, y alubias son más fáciles de digerir para los niños si las haces en puré, y lo adornas con perejil, cilantro, o espinacas en forma de tiras.