Todos respiramos de manera automática, es decir que la gran mayoría de las veces no pensamos en ellos, por lo que no tomamos conciencia de la misma. La respiración es un proceso imprescindible para la supervivencia, como bien sabemos. Respirar de manera incorrecta puede acarrear problemas de fatiga, déficit de atención, irritabilidad o problemas en la expresión oral y muchos otros. ¡Te enseñamos cómo mejorar la respiración en los niños gracias a actividades como la caja del soplo!
El habla se produce en la fase de espiración del aire por la boca. Si no existen problemas, respiramos y hablamos con normalidad. Pero si existe alguna dificultad o situación que altere la respiración pueden aparecer problemas en el lenguaje hablado, como antes mencionamos. Todo nos lleva a resumir que un buen dominio de la respiración es importante no solo para tener una buena salud, también lo es para corregir algunos defectos del habla. Además una buena respiración ayuda a controlar el estrés y la ansiedad. Pero, te estarás preguntando qué puedes hacer para mejorar la respiración de tus hijos. Pues sigue leyendo y te lo contamos.
¿Qué es la caja del soplo?
Dicho así puede llevar a numerosas confusiones, por eso será lo primero a lo que le demos prioridad. La llamamos ‘caja del soplo’ porque es un grupo de actividades de respiración. Al poner en práctica dichos ejercicios o actividades, en edades tempranas, estaremos consiguiendo que la adquisición del lenguaje se potencia, al mismo tiempo que se evitan las disfonías funcionales y como no, se mejora la calidad respiratoria en todos los que lo practiquen. Aunque suene un poco complicado no lo es para nada. Porque con actividades básicas y muy divertidas conseguiremos grandes resultados.
¿Qué fortalece el soplo en los niños?
Hay que decir que el simple gesto de soplar les estará dando una serie de beneficios sin pensarlo. Porque va a ejercitar y fortalecer los músculos protagonistas en el momento del habla, así como la zona de las mejillas. Hay que decir que el soplo también hará que los niños pronuncien mucho mejor cada palabra. Seguro que ya sabes los lazos que tiene el lenguaje con la respiración. Porque cuando vamos a emitir las palabras necesitamos un apoyo de tipo diafragmático y un empuje de la parte del abdomen con la finalidad de realizar la pronunciación adecuada. Algo que se debe practicar para mejorar dicha función.
Cómo trabajar la respiración en niños
Aunque ya hemos dicho que la respiración es algo automático, sí que podemos trabajar la respiración en los niños de una manera consciente. Esto hace que puedan controlarla en ciertas ocasiones, para intentar que la relajación llegue a sus cuerpos. Sin olvidar que cuando se respira de manera correcta, el cuerpo se oxigena y nos sentiremos mucho más aliviados. Así que, los más pequeños de la casa también pueden comenzar por aprender algo tan sencillo como esto. Para introducirlo en las actividades de clase, nada como desde sus asientos les pediremos que tengan una posición recta, en la que apoyen la espalda en el respaldo de las sillas.
Ahora, es el momento de que pongan sus manos en la zona del abdomen. Se les pedirá que inhalen por la nariz, de manera profunda, e hinchando el vientre al mismo tiempo. Luego, se irá soltando al aire emitiendo un sonido como si de una serpiente se tratara. Verás cómo así se interesan todavía más por una actividad como esta. Al soltar el aire, el abdomen también se irá vaciando y desinflando. Esto hará que tengamos un mayor control del cuerpo, siempre que lo pongamos en práctica.
Cómo hacer ejercicios de la caja del soplo: Las actividades más divertidas
La caja del soplo es una actividad lúdica que llevan a cabo muchos maestros y logopedas, para enseñar a los niños a modular su respiración de manera fácil y divertida. Pero tu misma puedes hacerlo también en casa con tus hijos. Para llevar a cabo esta actividad solo necesitas una caja en la que puedes incluir diversos objetos relacionados con la respiración. Aquí tienes algunas ideas:
Pompas de jabón
Invita a tus hijos a hacer pompas de distinto tamaño, a soltarlas, retenerlas, explotarlas o jugar al tenis con ellas. Ya sabes que con agua y jabón líquido o detergente podrás conseguir unas bonitas pompas. De hecho hay una serie de artilugios que venden como ‘Pomperos’ y lógicamente están destinados a ayudarnos en esta tarea.
Inflar globos
Es otra de las actividades básicas y necesarias a partes iguales. Porque ya sea por diversión o por decoración de una fiesta de cumpleaños, el inflar globos también hará que la respiración mejore. Se fortalecen los pulmones y con ellos también los músculos que forman parte del proceso respiratorio.
Hacer carreras con una pelota de pin pon o con bolitas de algodón
A veces no es solo echar el aire por la boca, sino que también el contenerlo o el poner la boca de la manera correcta, ayudará mucho más de lo que pensamos. Es una manera idónea de practicar a la hora de tener que pronunciar ciertas letras.
Soplar, sorber con pajita
Pon agua en un vaso y deja que tu hijo experimente haciendo burbujas o sorbiendo el líquido. Seguro que ya lo ha hecho en varias ocasiones y les hemos regañado porque estaban jugando. Pues ese juego sí que tiene también sus ventajas. Primero porque de nuevo es una manera de modular la respiración, pero por otro, será de lo más divertido para ellos cuando vean las pompas en el agua.
Soplar velas es otra actividad de la caja del soplo perfecta
Se puede soplar fuerte para apagar la vela, suave para evitar que se apague, apagar varias velas a la vez, apagarlas a través de una pajita. Como vas a practicar con tus hijos en casa, siempre podrás amoldar el juego a tu antojo. Haciendo que sea una especie de reto que tienen que superar con creces.
Soplar plumas y tratar de mantenerlas en el aire
Imagínate la diversión que tendrán si deben conseguir que unas plumas, o algo similar, permanezca más tiempo en el aire. Sabemos que solo con una ráfaga del mismo se conseguirá el reto. Así que, propón el juego porque seguro que durará más de lo que imaginas. ¡No se cansarán nunca!
Soplar un molinillo de viento
Siempre nos han llamado la atención los molinillos de viento. Con sus aspas y cualquier tímido aire ya se movían. Pues es otra de las maneras de mejorar la respiración en los niños a través de una actividad que conocemos. Si no tienes molinillo en casa, siempre podrás hacerlo con papel y cartulina.
Utilizar instrumentos como flautas, armónicas, matasuegras o silbatos
Tampoco podía faltar la idea de introducir en los juegos, de la caja del soplo, una serie de instrumentos. Porque sin duda, también son la gran base que tenemos para mejorar la respiración de los niños y aumentar su nivel de diversión. Mientras a algunos les encante soplar en los silbatos o matasuegras, a otros les llamará más toca la flauta.
Como ves las posibilidades son tantas como tus hijos y tú podáis imaginar. Lo único que debes tener en cuenta es que la sesión con la caja del soplo debe ser un momento divertido. Por eso no se debe forzar a los niños si no les apetece y parar cuando se cansen ya que los ejercicios respiratorios pueden resultar agotadores.