Si crees que los niños deben de aprender a cocinar no debes de tener ninguna duda ya que es una actividad que les permite disparar su imaginación, les tranquiliza y es una tarea aprendida para toda la vida. Pueden aprender en casa con sus padres o asistiendo a alguna clase de cocina para niños, pero otra de las formas de conocer la cocina es jugando.
La forma que se les brinda jugando y aprendiendo a cocinar puede ser de dos formas, una de la manera habitual con sus juguetes en mano y otra la ya vista en las puertas de nuestro siglo XXI y es de manera virtual con el uso de las nuevas tecnologías.
¿Cómo aprenden a cocinar jugando?
Hay diversos aspectos de forma tradicional que se les puede ayudar a aprender, de todas las formas posibles, pueden delegar un puesto de chef en su propia cocina de juguete y es interpretando al propio jefe de cocina formulando un plato estrella.
Con esta iniciativa ellos pondrán rienda suelta a su imaginación, tratarán de cocinar por imitación y tratarán de usar los ingredientes necesarios junto con los utensilios correspondientes para su elaboración. Si bien les viene a mano, pondrán un poco de orden y limpieza, pues es algo fundamental en la cocina y entre otros aspectos querrán ser responsables y organizados en su juego.
La imaginación es el punto clave de este juego de aprendizaje, pueden jugar con otro niños e intentar dar un puesto a los alimentos con los que están jugando, como jugando a los supermercados, a que son jefes de restaurantes dónde tienen que elaborar platos a sus clientes o el típico juego de preparar comidas en un entorno familiar en el que harán el rol de padres responsables.
La otra forma de cocinar con el juego es de manera virtual. Mediante la tecnología los niños pueden descargar infinidad de aplicaciones y acceder a un mundo sin límites dónde pueden elaborar suculentos y atractivos platos.
Hay aplicaciones para preparar menús como platos principales, de comida rápida y de postres. La verdad es que aquí se les brinda la oportunidad de conocer alimentos que en casa no pueden tener a mano, de manera imaginaria pueden crear platos muy llamativos de helados y tartas, elaborar platos de otros países conociendo las propias técnicas de su cultura. No podemos ser partidarios de muchos de estos juegos en enseñar a comer dulces o comida rápida pero sí en ser justos en quedarnos con la parte imaginativa de colores y formas que se les aplica en el juego.
Hacer de la cocina de casa un juego
Esta es la mejor parte en la que los niños pueden aprender a cocinar y con el juego. Aquí los niños aprenderán de forma real a lo que es cocinar. No hace falta crear grandes platos sino más bien en elaborar recetas sencillas, lo importante es que van a crearlo y que saben que al ser partícipes de su propia creación podrán tener mejor acceso a probar ingredientes nuevos que antes no habían comido.
Con este juego de manera real aprenderán mucho mejor sus conceptos, conocerán de cerca las normas que se imponen en la cocina, como son sus técnicas reales, como el manejo de diferentes utensilios en su práctica (cuchillos, cucharas…) y sobre todo a manipular los alimentos con las manos y conocer sus texturas, esta es la parte que más les gusta.
Esta práctica les ayudará a fortalecer su autoestima y a que crezca su autonomía, conocerán cómo es su responsabilidad de primera mano y si puede ser les enseñará a que en un futuro participen de manera activa en las tareas de la casa.