Cómo ayudar a un adolescente con baja autoestima

La adolescencia es una etapa complicada, de cambios importantes tanto físicos como psicológicos que afectan a la autoestima de los chicos y chicas. Es el paso de ser niño a ser adolescentes antes de llegar a ser adultos. De pasar de ser el centro de su vida sus padres y su familia a ser sus amigos. Es importante que los padres sepan cómo ayudar a un adolescente con baja autoestima para apoyarle durante esta dura etapa del desarrollo.

Cómo ayudar a un adolescente con baja autoestima

Los padres de forma inconsciente, podemos fortalecer o debilitar la autoestima de nuestros hijos. En nuestras manos está el aprender a mejorar su autoestima. Os dejamos unos consejos prácticos para adolescentes con baja autoestima.

Buena comunicación

La adolescencia es un punto de inflexión en la relación con los padres. Puede haber un distanciamiento si no se trabaja la comunicación sincera y recíproca. Debemos escuchar a los adolescentes sin juzgar, con la mente abierta y tener paciencia para que lo cuenten en el momento en el que estén preparados. Hazle saber que estás ahí para cuando te necesite. Será la única manera en que tu hijo confíe en ti para contarte sus problemas y puedas ayudarle.

Si le juzgas, le criticas y le echas en cara continuamente que no te cuenta las cosas no hará que mejoren la situación. Lo único que conseguirás será que el distanciamiento sea mayor.

Buenos límites

En esta etapa seguramente quieran negociar los límites y reglas que tenían para que sean más amplios. Deberéis negociar según cada chico/a, su personalidad, su responsabilidad… los límites a cumplir.

Los adolescentes también necesitan normas para sentirse seguros y a ser responsables, aunque siempre van a intentar romperlas. Los límites son muy importantes para una buena autoestima. Es importante que ambos padres se pongan de acuerdo en cuales son las normas a cumplir en casa para que no haya discrepancias.

Elógiale

Normalmente nos solemos centrar en lo que hacen mal. Si sacan un 10 en dibujo y un 4 en matemáticas, nos centraremos en lo mal que llevan las matemáticas. Debemos también elogiar las cosas que hacen bien, como en este caso sería el dibujo. Celebrar su esfuerzo y dedicación, aunque el resultado no haya sido el esperado. Deben ser elogios sinceros y realista, sin exagerar.

En lugar de centrarse en lo negativo hay que apoyarle para que no aprendan un concepto negativo del fracaso. Si les dicen continuamente que no valen para nada o que todo lo hacen mal obviamente acabarán por creérselo.

Fomenta su pasión

Todos los adolescentes tienen algo que les apasiona y se les da bien. En el ejemplo anterior sería el dibujo. Para fomentar su autoestima podemos promover que realice tareas que estén relacionadas con su pasión. Se sentirá capacitado, feliz y aceptado. Su confianza y seguridad crecerán, así como su autoestima.

Escucha su opinión

Los adolescentes tienen mucho que decir y necesitan sentirse incluidos en las decisiones familiares. Hazle sentir que su decisión es importante y se tendrá en cuenta. Se sentirá respetado y tratado como a un adulto.

Apoya sus hobbies

Apoya sus hobbies por muy disparatados que sean, siempre y cuando no interfiera con sus responsabilidades. Los adolescentes están buscando su identidad y exploran entre sus facetas para poder desarrollarse como persona. Que se sientan apoyados por ti es muy importante para ellos. Necesitan sentirse valorados, no olvides que acaban de ser unos niños aunque no lo parezcan.

Pasa tiempo con ellos

Aunque su centro ya no sean sus padres, si no sus amigos, los adolescentes también necesitan pasar tiempo de calidad con sus padres. Hacer algo juntos que les guste puede reforzar la relación, mejorar la comunicación, y en definitiva mejorar su autoestima. El tiempo aunque sea poco debe ser de calidad.

Fomenta que haga ejercicio

El ejercicio nos ayuda a liberar endorfinas y serotoninas que nos ayudan a nuestro bienestar emocional. Ayuda a mejorar la autoestima, sobre todo en deportes en grupo, además de mejorar sus relaciones sociales.

Porque recuerda… una buena autoestima es la base para su salud emocional.