Cómo elegir el nombre del niño sin tener conflictos con los familiares, es algo que se preguntan muchas parejas cuando están esperando un bebé. Antiguamente se elegían los nombres por tradición, con lo que realmente no se elegían, sino que estaban destinados desde antes incluso de la concepción. Los niños y niñas de las nuevas generaciones adoptaban los nombres de abuelos y abuelas, irremediablemente, fuesen o no, del gusto de los padres.
Algo que todavía hoy en día se suele hacer en muchas casas, aunque no tanto como una obligación. En la actualidad, si se escoge el nombre de un familiar para los niños, suele ser como un homenaje. Sin embargo, todavía existen casos en los que la familia quiere intervenir en el nombre de los futuros bebés y para los padres, puede resultar abrumador. Por ello, si estás en esta tesitura te dejamos algunos consejos para ayudarte a elegir el nombre del niño.
Elegir el nombre del niño, cuestión de dos
Está muy bien lo de tener en cuenta la opinión familiar, porque así se sienten más involucrados. Pero eso debe ser siempre bajo una decisión personal, y no como una obligación. La forma en que la familia, más allá de los progenitores, se involucre en las decisiones que afectan a la vida del hijo, no debe interceder en los deseos de las personas que más importan en este caso.
Es decir, no es lo mismo preguntar a los abuelos por sus preferencias o a los tíos para así tener más opciones, que tener que elegir lo que ellos quieren por no ofenderlos. Si lo permites, al final te arrepentirás aunque el nombre elegido te guste. Porque no dejarás de recordar que lo hiciste bajo presión. Elegir el nombre del niño es una de las decisiones más comprometidas que se deben tomar cuando se espera un bebé.
Porque el nombre que se impone a un ser que todavía no ha llegado al mundo, le acompañará durante toda su vida. Por lo tanto, la decisión debe ser totalmente meditada, sin presiones externas. Piensa que el nombre es la seña de identidad de una persona y lo va a llevar tu hijo. Así que la mejor manera de decidirlo, es de una forma serena, con la ayuda del otro progenitor y teniendo en cuenta las preferencias de ambos.
¿Cómo rechazar los consejos de la familia?
Es posible que los abuelos o los tíos quieran animarte o aconsejarte a la hora de elegir el nombre de tu bebé. Como es posible que no sepas bien cómo rechazarlo sin que se puedan sentir ofendidos. Si te sientes muy presionada, prueba a llevarlo en secreto como si fuese una sorpresa para todos. Deja que te den sus preferencias, diles que las vas a tener en cuenta y que cuando llegue el momento, les contarás cuál es el nombre elegido.
La forma y el momento de contarlo dependerá de ti. Si tienes demasiada presión y quieres alejar esa cuestión de tu vida para disfrutar de tu embarazo con tranquilidad, puedes incluso esperar a que el bebé nazca y esté registrado. De esa forma nadie podrá decir nada porque ya será demasiado tarde, aunque no les guste la idea. Si lo prefieres, puedes hacerlo de una forma divertida.
Escribe el nombre en un sitio especial, unas camisetas, un cuadro grande e incluso puedes escribir una carta para cada miembro de la familia. De esta forma, aunque no les guste mucho el nombre o no sea el que ellos hubieran elegido, se sentirán más satisfechos porque tener el detalle de hacerlo tan especial les hará cambiar de idea. Recuerda que en la vida del bebé estarán involucradas muchas personas que lo quieren y querrán cuidar de él.
Y eso es algo maravilloso que influye muy positivamente en la vida y el desarrollo emocional de los niños. Pero siempre desde el amor, el cariño y la comprensión. Porque cuando algo se vuelve obligación, puede estropear hasta el más especial de los momentos, como la llegada de la vida de un hijo. Disfruta de este proceso de elegir el nombre del niño en la intimidad y siempre lo recordarás como uno de los momentos más especiales de tu embarazo.