La mayor incógnita de una futura madre es cuál será el sexo de su bebé. La mejor aplicación que se puede consultar es con la visualización de una ecografía en el momento que se pueda utilizar. Para poder realizar dicha consulta y de una forma divertida, se puede utilizar el calendario maya del embarazo.
Este calendario se basa en estudios estadísticos, dónde predice el sexó del bebé basándose en las fases lunares. Se compone de 260 días para cada año, está formado de 13 meses y de 20 días cada mes. Este pronóstico se basa en la creación y fascinación de los mayas, ya que los ciclos del tiempo formaban parte de sus vidas. Eran unos grandes matemáticos y muy audaces con el manejo de la astronomía, dónde creaban sistemas de calendarios muy precisos.
Cómo funciona el calendario maya del embarazo
El calendario que representamos a continuación corresponde a la tabla maya para este año 2022. Se puede observar cómo las fases lunares no coinciden con los meses de nuestro calendario, pero será fácil de poder entender cómo emplearla.
En esta tabla se utiliza la edad lunar de la madre junto a los meses del año. A la izquierda del dibujo se puede consultar la fecha probable del parto y escoger el número que le corresponde. También se escogerá la edad lunar junto a la fecha de nacimiento de la madre. Aquí, también se escogerá el número que le corresponde.
Foto extraída de Mammarama
A continuación, se hacen coincidir los dos números que representa el círculo de colores y observar la casilla con el color que corresponda. Evidentemente, si el color es azul es niño y si el color es rosa será niña.
Otros métodos para conocer el sexo del bebé
La idea de conocer el sexo del bebé siempre nos acerca a poder idealizar a nuestro pequeño o pequeña cuando lo tengamos en brazos. Es mucho más cercano poderlo imaginar, ir comprando detalles pequeños, incluso ya podemos ir escogiendo un nombre bonito.
En uno de nuestros artículos podemos detallar algunos trucos para conocer el sexo el bebé. Algunos trucos se puedes escoger de forma entretenida, ya que el acierto no llega a estar seguro, pero podría encajar. Entra en la sección que hemos detallado y observa qué pueden deparar las pruebas a realizar.
Existe una ecuación matemática que también puede ayudar. Se necesitará la edad de la madre cuando concibió el bebé, el mes en que se quedó en estado y el mes de la fecha de nacimiento del bebé. Se suma todo: 31 (la edad de la madre) + 8 (agosto) + 5 (mayo) = 44. Si el resultado es par, será niña, y si el resultado es impar, será niño.
El calendario chino
El calendario chino se representa a través de una tabla que se modifica cada año. Con ella se puede pronosticar antes de la concepción el sexo del bebé que quieres tener. Es muy fácil de utilizar, hay que buscar el casillero con la edad de la madre y hacer coincidir en el tablero en la casilla del mes en la que se intentará concebir el bebé.
Por ejemplo, una madre que tenga 35 años intentará concebir el bebé en unos meses u otros, siempre que coincida con el color de la casilla que quiera escoger. Si el color es azul será niño y si el color es de color rosa, será niña.
Conclusiones
Todos los métodos descritos son una forma divertida y entretenida para conocer el sexo del bebé. No son más que conclusiones que pueden llegar a acertar, pero en ningún momento tienen un valor científico. La prueba a la que podemos esperar, es a la ecografía de la semana 20 de gestación, dónde los genitales del bebé ya están formados y hay una mayor probabilidad de acierto.
Las pruebas más concluyentes y definitivas son a través de otras pruebas como la amniocentesis o las pruebas de ADN fetal. Este tipo de pruebas pueden revelar el sexo, pero en realidad se realizan para detectar malformaciones congénitas del feto.