El lenguaje y la forma de hablar de los padres en el ámbito familiar, va a incidir de una manera directa en el desarrollo de los niños. El lenguaje que se usa a diario influye en los niños ya que suelen adquirir como hábitos lo que ven de sus padres, ya sea bueno o malo. Es por ello que es importante el usar el mejor vocabulario y lenguaje posible cuando se está delante de los pequeños de la casa.
De esta manera los niños aprenderán a manejar un vocabulario adecuado y a usarlo de la mejor manera posible. En el siguiente artículo te damos una serie de pistas para que el lenguaje usado por los padres sea el mejor posible para los hijos.
La importancia del lenguaje de los padres en los hijos
En el momento en el que un niño de corta edad aprende a hablar, su lenguaje va a estar relacionado directamente con lo que escucha a diario en su entorno más cercano. La forma y la manera de hablar es un reflejo de como se habla en la casa. Es por ello que resulta esencial el hecho de que los padres hagan un uso correcto del lenguaje y del vocabulario en el día a día.
Los padres son los modelos de los hijos de ahí la gran importancia de usar un lenguaje correcto y adecuado. El lenguaje empleado de los padres debe ser siempre positivo y basado en la motivación. De esta forma, los niños emplearán un tipo de vocabulario basado en el positivismo, algo que es importante a la hora de afrontar el día a día.
Qué deben evitar los padres a la hora de hablar
A la hora de hablar, los padres deben evitar dos tipos de conductas:
- Los niños no deben percibir en ningún momento un lenguaje negativo y pesimista. Decir a todas horas que la vida es injusta y que está llena de problemas, va a provocar que los pequeños apenas luchen y no se esfuercen a la hora de conseguir sus objetivos.
- Los padres no deben usar el lenguaje para criticar de manera habitual a otras personas. Es importante el inculcarles valores basados en la tolerancia y el respeto hacia los demás. Los niños no deben ver a sus padres criticar a todas horas ya que es algo que no deben adquirir como hábito en su día a día.
Qué deben reforzar los padres respecto al lenguaje empleado
- En relación con el lenguaje, los padres no deben dejarse llevar bajo ningún concepto por las emociones. Los niños no deben ver a sus padres enfadados ni alterados.
- Si se hace algún tipo de crítica debe ser siempre de tipo constructiva. El hacer descalificaciones a otra persona, perjudica de manera directa al pequeño.
- En el caso de que el niño haya hecho algo que no está bien, hay que centrarse en lo que ha hecho mal y evitar culpar al propio niño. Las críticas a los hijos no valen para nada y no se justifican.
- No se debe juzgar a un niño sin haberlo escuchado previamente. Es importante el dejarlo que se exprese y se explique y partir de ahí actuar de la manera más justa posible.
- El lenguaje y el vocabulario debe ser siempre usado como refuerzo positivo en relación con la conducta del pequeño. Ello es importante a la hora de conseguir que el niño crea en su persona y pueda lograr los objetivos deseados.
En definitiva, el lenguaje que usan los padres en su día a día va a tener una influencia directa en el comportamiento y desarrollo de sus hijos. El lenguaje usado es esencial a la hora de transmitir una serie de valores válidos en el día a día como es el caso del respeto, de la motivación o de la constancia. Es por ello que se aconseja a los padres el cuidar el lenguaje cuando se encuentren delante de sus hijos.