Muchos padres ya atribuyen que el aprendizaje de la música no se convierte en un simple pasatiempo, sino que es una actividad pedagógica que cada vez gana mucho más terreno. Interpretar un instrumento activa dentro de su cuerpo una enorme cantidad de recursos físicos y mentales, a parte de que es gratificante y emocionalmente placentero.
Todos los niños nacen con la capacidad de apreciar la música y es ahí cuando podemos dar paso para que continúen con ese potencial para poder disfrutar de ello plenamente. Son tantos los beneficios que aporta que más adelante os daremos detalles de todo ello.
Los beneficios de la música
- La música es un gran potencial emocional. Acerca a los niños a ese mundo imaginario, de bienestar y su potencial auditivo se amplifica. Por si fuera poco, ayuda a tener mejor memoria ya que mejora la concentración y la atención.
- Gracias a esta gran atención los reportará a un temprano aprendizaje de las palabras e incluso de otros idiomas. Si aprende canciones en inglés, éste será un gran benefactor.
- Favorece la coordinación corporal ya que al estimular el movimiento y los ritmos musicales está obteniendo una mejor respuesta al equilibrio y al control del ritmo.
- Y no podemos olvidar que a parte de favorecer la imaginación y la creatividad, les ayudará a resolver problemas matemáticos de razonamientos complejos. Para saber más a fondo de estos beneficios puedes ver este enlace.
A qué edad es conveniente el aprendizaje de la música
No hay límite de edad inicial para que un niño se inicie en la música. De hecho la música lo es todo, abarca cualquier tipo de ritmo, o incluso el canto de su madre desde que son bebés y de ahí ya empiezan a tener el primer contacto musical con la educación musical.
Las madres o familiares ya empiezan instintivamente a cantar a los niños desde que son muy pequeños y esos ritmos y letras ya quedan grabados a modo de base para el resto de sus vidas. Ya con el tiempo los niños necesitarán de ciertas destrezas para poder iniciar de sus habilidades físicas en manos, dedos, brazos, piernas, pies o labios para poder tocar un instrumento.
La edad recomendable sería de 5 a 6 años, dónde podemos acercar al niño a su iniciación de una forma lúdica, haciendo que jueguen con los instrumentos de percusión o que el niño escuche o dibuje la música. Otras formas de acercar la música, es escuchando canciones y saber interpretarla de forma natural, o bien aprendiéndose sus letras, intentando imitar sus ritmos y bailarlas.
Cómo deben de aprender música
Uno de los métodos más utilizados y que mejor funcionan es el método Suzuki. El creador de esta técnica llegó a la determinación que la mejor manera de aprender música era de la misma forma que aprenden una lengua. No es un talento innato, sino una destreza y eso se consigue a base de entrenar ‘cualquier niño a quien se entrene correctamente puede desarrollar una habilidad musical, y este potencial es ilimitado’.
Tener al lado a un profesor es primordial, pues es la persona que sabrá evaluar y atenderá las dificultades del niño. Sabrá cuando tiene que corregirlo en posicionar bien las manos y cuando realiza un sonido correcto.
¿Cuál es el instrumento adecuado para cada niño?
Cada instrumento se prestará de forma diferente en cada niño. Encontramos los instrumentos como el piano dónde la nota ya está prefabricada o los de viento dónde hay que fabricar la nota a través del la expulsión del propio aire.
Con este punto queremos destacar en que el niño debe de sentirse cómodo con el instrumento y ser progresivo con él. En el momento que lo hace incorrectamente y no avanza quizás sienta una frustración y lo quiera dejar.
Un profesor te puede determinar qué instrumento es el adecuado para que le guste y avance con él, para ello observará cuidadosamente la capacidad y habilidad del niño para que pueda adaptarse al instrumento.