¿Cómo se que mi bebé tiene fiebre?

niño con fiebre en la cama abrigado

La fiebre suele representar un motivo de alarma y preocupación para los padres. Es uno de los síntomas más comunes que se presentan en los primeros años de vida. Se caracteriza por el aumento de la temperatura central que generalmente, pero no exclusivamente, es parte de una respuesta de defensa contra patógenos u otras sustancias extrañas.

La fiebre no es una enfermedad, sino un síntoma, y puede deberse a diversas causas.

¿Qué puede causar fiebre en los bebés?

Existen muchas causas que pueden dar lugar a fiebre en los primeros años de vida  como por ejemplo faringitis, amigdalitis, infecciones de oído, traqueítis, pero también resfriados comunes o cualquier otra  infección del tracto respiratorio superior  o  enfermedades exantematosas  como sarampión, varicela, rubéola o paperas.

Se trata de patologías muy frecuentes, sobre todo en los meses de invierno. Los padres deberían aprender a lidiar con los picos repentinos de temperatura corporal del niño, teniendo en cuenta que los niños (sin enfermedades específicas y generalmente con buena salud) pueden afrontar y superar la fiebre sin problemas. Hay que tener presente que la fiebre es una defensa del cuerpo.

Sin embargo, la fiebre alta debe considerarse un signo de una infección bacteriana grave en algunos casos, como en bebés menores de tres meses, y/o con la presencia concomitante de leucocitosis y/o un aumento de los índices de inflamación.

termómetro bebé madre y abuela

¿Cómo saber si mi hijo tiene fiebre?

El niño con fiebre  generalmente suele sentirse mal, cansado y no tiene ganas de comer. Acostumbra a tener los ganglios linfáticos inflamados con mucha más frecuencia que en los adultos.  Es un fenómeno completamente normal y no debería asustarnos.

Solo si también se presentan otros síntomas sospechosos o si la inflamación de los ganglios linfáticos dura más de 3-4 semanas después de que la fiebre desaparezca, convendría que el pediatra le hiciera una buena revisión.

¿Cómo curar la fiebre en un niño?

La Organización Mundial de la Salud señala como temperatura central normal si se encuentra entre 36,5 y 37,5 ° C. cabe recordar de nuevo que la fiebre es una defensa del cuerpo, así que a menos que lleve más de 3 días con fiebre o que sea superior a 39° C, lo mejor es dejar que la fiebre haga su efecto.

Un niño tiene fiebre cuando su temperatura corporal central supera los 37,5 ° C. En este caso, la primera acción ayudarlo a dispersar el exceso de calor y hacerle beber mucho (mejor si son líquidos azucarados que reducen el riesgo de acetona), pero sin obligarlo a comer si no tiene apetito. Si el niño no se encuentra bien en general, se le debe administrar un antipirético, pero mejor que la fiebre le ayude a combatir la posible infección bacteriana o vírica.  Tal como os he comentado antes.

Fiebre infantil, oso de pelche con un termómetro y un jarabe

¿Qué hacer si el niño tiene fiebre?

  • Si un recién nacido tiene fiebre (primeros 6 meses de vida), siempre se debe consultar al pediatra.
  • Se debe hacer reposo (pero no necesariamente en la cama) en un ambiente cómodo (pero no demasiado cálido).
  • Si el aumento de la temperatura corporal se acompaña de malestar del niño se puede administrar el antipirético según las instrucciones del pediatra o farmacéutico.
  • Nunca se les debe dar ácido acetilsalicílico (AAS).
  • Beber muchos líquidos (agua, leche, jugos de frutas, sopas, etc.)
  • No se debe obligar al bebé a comer si no le apetece. Lo mejor es ofrecer alimentos ligeros pero nutritivos y de fácil digestión.
  • No hay que poner mil piezas de ropa o mantas al bebé. Es mejor usar ropa de algodón que ayude a la dispersión del calor corporal.
  • Si es muy pequeño o está asustado, mejor estar a su lado y tranquilizarlo.

Cómo medir la temperatura en el bebé

La forma más sencilla, rápida y segura de evaluar la temperatura de un bebé es colocar un termómetro digital en la axila. Se desaconsejan medir la temperatura por vía oral y, a día de hoy, tampoco se recomienda la temperatura rectal en menores de 5 años por su invasividad y las molestias que conlleva.

Otra posibilidad es utilizar el termómetro de oído digital, que te permite medir la temperatura interna en unos segundos. Es ideal para niños inquietos, pero en los casos de infección de oído puede verse alterada la lectura. En la otitis, el valor de la temperatura medida puede ser más alto que el real porque la inflamación hace que el oído se caliente y puede parecer que haya fiebre aunque en realidad no.

Para simplificar la medición de la temperatura en los recién nacidos y en los más pequeños se ha desarrollado un termómetro incorporado en el chupete que permite valorar si hay fiebre de forma rápida, fiable y sin molestias.


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.