Los primeros años de vida, los niños van experimentando grandes cambios. Ya que será ahí dónde se desarrolle su conducta, por eso alrededor de los dos o tres años de edad podemos notar que tienen bastantes episodios egocéntricos. A veces no les damos demasiada importancia, porque sabemos que irán cambiando, pero siempre es bueno estar prevenido. ¿Cómo tratar a un hijo egocéntrico?
Quizás es una de esas preguntas más escuchadas. Porque un hijo egocéntrico es obstinado, no hace caso a la palabra ‘no’, son envidiosos y sobre todo, quieren salirse con la suya, intentando llamar siempre la atención. Así que, si quieres tratar a un hijo egocéntrico de la mejor manera posible, te dejamos una serie de consejos que puedes seguir.
Cómo tratar a un hijo egocéntrico: desviando su atención
Cuando vemos que nuestro hijo ya está haciendo gala de su egocentrismo, de la manera que sea, debemos cortarlo. Sabemos que aunque le digamos que no haga algo, no siempre nos hará caso. Por lo que es mejor usar otro tipo de técnicas. Una de las más importantes es desviando su atención. ¿Cómo lo hacemos? Pues es muy sencillo porque tenemos diferentes recursos para ello. Debemos cortar lo que está haciendo proponiendo un nuevo juego. El clásico ‘Veo, veo’ siempre funciona. Claro que si estás en casa, siempre puedes optar por sacar algún juguete nuevo, proponer alguna tarea, etc. La cuestión es romper el momento, para que se concentre en otra cosa. De manera que su mente no siga fijada a esa obstinación básica.
Optar por actividades en grupo
Es cierto que siempre hay momentos en los que nuestros pequeños juegan solos, pero otros que necesitan de compañía. Por lo que debemos fomentar las actividades en grupo siempre y cuando sean posible. De manera que esto hará que se acostumbren a compartir con sus compañeros y a ser más abiertos en este sentido. Porque un niño egocéntrico le costará el tener que estar tan rodeado. Por eso, debemos de introducir juegos de este tipo y no solo en el aula, sino también en los momentos de ocio, como en el parque, etc.
Se aprende jugando
Como las órdenes no las va a atender tal y como nos gustaría, entonces lo haremos jugando. Si quieres que deja hablar a sus compañeros y a las demás personas, entonces puedes inventarte un juego de turnos. Cada carta (o incluso lápices de colores) de un color determinado será el pase para hablar y cuando sea de otro color, se callará dejando a los demás que hablen. Es una opción perfecta que la podemos amoldar a todas aquellas normas que queramos enseñarles. Hay que tener en cuenta que como es una etapa de su vida temprana, siempre tendremos que pensar en opciones lo más divertidas posible, así con elementos visuales llamativos, formas o colores que les llamen la atención.
Ten mucha paciencia
Sí, sabemos que es muy sencillo de mencionar pero no tanto de llevar a la práctica. Claro que si perdemos la paciencia menos vamos a conseguir. Así que, entendemos cómo es el comportamiento de nuestros hijos y ahora nos queda poner en práctica diferentes técnicas para ver los resultados. Algo que seguro no se darán a la primera de cambio. Pero con el paso del tiempo y con estas prácticas seguro que se consigue ver los progresos. Así que, si ellos o ellas deben aprender, es tu turno de aprender también a llevar mejor la paciencia.
Deja que tome alguna decisión y felicítalo
Decimos ‘alguna decisión’ porque si lo dejamos a su aire, seguro que serán todas. Por eso, después de ir mostrándole lo que sí y lo que no con juegos, también llega el momento de dejar que ellos tengan alguna iniciativa. Será de cosas cotidianas, de elegir el color que les gusta en la ropa o de usar unos juegos o bien otros, etc. Pero dentro de ello, siempre debemos felicitarlo por dicha decisión. Ya que es un premio para ellos y se sentirán más respaldados que nunca. Solo con ese gesto estarán felices y no necesitarán seguir ‘apoderándose’ de todo.
El poder practicar con el ejemplo y ver que la educación y el día a día se basa en el respeto, el cariño y mucha bondad, tratar a un hijo egocéntrico será más llevadero.