Compresas postparto, cuáles son las más recomendables

Compresas postparto, cuáles utilizar.

Elegir bien las compresas postparto es esencial para un momento muy delicado. Es fundamental tenerlo todo preparado para esos primeros días después de dar a luz, porque es lo que te va a ayudar a vivir tu recuperación sin tener que preocuparte por este tipo de cuestiones. Y justo después de dar a luz, comienzan los cuidados postparto que no debes descuidar para recuperarte correctamente y lo antes posible.

Tanto si se trata de un parto vaginal, como si se da una cesárea, las compresas postparto serán necesarias. Además, las estarás utilizando durante varias semanas, que es lo que dura el proceso de expulsión de los loquios, es decir, la sangre, los restos de tejido placentario y el moco cervical. En definitiva, es importante elegir bien las compresas postparto para estar tranquila durante tu recuperación.

Cómo elegir las compresas postparto

Cuidados postparto, qué compresas usar.

Durante las semanas que se produce la expulsión de los loquios, necesitarás dos tipos de compresa, ya que la cantidad de flujo cambia según pasan los días. Al comienzo, durante los primeros 7 u 8 días del postparto, la secreción de la expulsión de los loquios es bastante abundante. Después, hacia el décimo día se reduce el flujo, pero se puede alargar hasta pasadas 6 u 8 semanas después del parto.

¿Qué se recomienda para los primeros días?

Lo más aconsejable para los primeros días postparto es elegir compresas de celulosa o directamente de algodón, es fundamental que no contengan nada de plástico. Teniendo en cuenta que la secreción es importante, es recomendable utilizar bragas desechables. Esto es porque el sangrado es tan abundante que es bastante habitual manchar la ropa interior, por lo que es más práctico tirarlas en lugar de andar lavando con lejía tras cada cambio.

Para sentirte más protegida, puedes ponerte dos compresas superpuestas. No es lo más cómodo, pero sí que te ayudará a sentirte más tranquila. Ahora bien, es muy importante que cambies las compresas postparto con frecuencia, no solo porque se llenan rápido, sino porque la humedad puede provocar infección. Por ello es preferible no mirar las de mejor calidad, sino unas de precio asequible para que las puedas cambiar sin que se resienta demasiado el bolsillo.

A partir de la segunda semana postparto

Cómo elegir las compresas postparto.

Después de los primeros 10 días aproximadamente, la cantidad de secreción disminuye notablemente. Ya en ese momento puedes volver a utilizar tu ropa interior normal porque ya se reduce la probabilidad de sufrir manchas. También puedes dejar de usar las compresas específicas para el postparto y usar las compresas habituales. No obstante, sigue siendo recomendable utilizar compresas de algodón, ya que el riesgo de infección se mantiene durante varios días.

Lo que sí es fundamental en cualquier caso es extremar las medidas de higiene. Cualquier despiste puede hacer que sufras una infección que complique tu recuperación. Estas son algunas recomendaciones para el cuidado de tu zona íntima después del parto.

  • Realiza un lavado dos veces al día, utilizando un jabón específico para la zona íntima. También debes lavarte después de ir al baño, con agua templada y jabón, nada de toallitas desechables.
  • La ducha es preferible al baño, evita sumergirte durante algunos días.
  • Después de lavarte o de la ducha, debes secar muy bien y con cuidado la zona. Es fundamental evitar que se produzca humedad, ya que es la fuente de proliferación perfecta de bacterias y hongos. Utiliza toallas pequeñas, preferiblemente de un solo uso y lávalas con agua caliente.
  • A la hora de limpiarte, recuerda cuál es la forma correcta en cualquier caso, de delante hacia atrás. Así evitamos que las bacterias puedan llegar a la zona vaginal y provocar infecciones.

Por último, evita utilizar ropa interior muy ajustada o de tejidos no naturales. El algodón es lo más recomendable en estos casos, tanto para las compresas postparto como para la ropa interior. No te olvides de las revisiones médicas, ya que son esenciales para comprobar que la recuperación es satisfactoria. Y recuerda que para poder cuidar de tu bebé, es fundamental cuidar primero de ti misma.



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