Hoy comienza el verano, una temporada que por lo general es sinónimo de vacaciones, descanso, diversión, largas jornadas en la playa o en el campo y mucho tiempo libre, sobre todo para los más pequeños de la casa. Sin embargo, este verano será muy diferente de otros años, al menos así son las previsiones. Este año 2020 estará marcado para siempre por el Covid-19 y una de las consecuencias de esta terrible pandemia, será la forma de disfrutar de este verano atípico.
No obstante, si una cosa nos ha enseñado este virus que no sabemos cuándo se podrá controlar, es que es necesario aprender a disfrutar las cosas de otra manera. La vida había alcanzado unos niveles de estrés, de velocidad, de materialismo y de querer o necesitar siempre más, que de alguna manera era necesario que algo ocurriera para poder parar.
Aunque lamentablemente este virus está causando la muerte a miles de personas en todo el mundo, es necesario buscar y encontrar el sentido positivo de esta experiencia. Así al menos, la pérdida de todas esas vidas no habrá sido en vano, porque al menos, las demás personas habremos aprendido lecciones como disfrutar de una vida, que no es más que un regalo.
Disfruta de las pequeñas cosas este verano
Quizá este verano no puedas realizar ese viaje que llevabas tiempo planeando, pero seguramente podrás pasar tiempo en familia, ese tiempo de calidad que tanta falta hace. Aprovecha estas circunstancias excepcionales para conocer más el sitio donde vives, los montes, las playas, los pueblos que hacen del mundo un lugar más apacible para vivir.
Enséñale a tus hijos que las cosas materiales no sirven de nada, si no es posible disfrutarlas en familia. Algo tan simple como un picnic en el campo, puede convertirse en una de las mejores experiencias familiares del verano. Un paseo en bici por el monte, una excursión a la montaña, una visita a los familiares de los pueblos que hace tanto que no ves. Cualquier actividad que se realice en familia, será especial este verano por todo lo que significa poder estar con los tuyos, algo que muchos por desgracia nunca podrán volver a disfrutar.