Hay madres y padres que cada vez que se van por las mañanas desearían quedarse en casa y poder pasar más tiempo en familia. No tener que aguantar el tráfico o el transporte público todos los días a las mismas horas, ni tener que pasar tanto tiempo en su puesto de trabajo… Anhelan el poder trabajar desde casa. Otras personas en cambio, tienen la suerte de poder trabajar desde casa y compaginar eficazmente su vida laboral con su vida familiar. Pero no todo el mundo vale para trabajar desde casa.
Trabajar desde casa requiere mucha autodisciplina, constancia y sobre todo, una buena organización del trabajo a realizar. Trabajar desde casa brinda a los padres el disfrutar de lo más importante de los dos mundos: estar siempre disponible para los hijos y recibir un dinero mensual por el trabajo bien hecho.
Pero que tu casa sea tu oficina puede causar problemas, especialmente si tu niño está en casa contigo durante las horas de trabajo. De hecho, intentar estar disponible para trabajar cuando tu hijo pequeño está cerca podría ser más difícil que en cualquier otra etapa: tu pequeño necesita una atención casi constante, pero a diferencia de un bebé, tu hijo se mueve. Pero que sea difícil no significa que sea imposible. Con estos consejos, podrás trabajar desde casa con un niño pequeño y no perder la cordura por el camino.
Levántate muy temprano
Aunque puede que no sea lo que más te guste de trabajar desde casa, e incluso quizá pensaste que podrías levantarte a la hora que quisieses… De hecho, si quieres hacer las cosas bien, tendrás que levantarte mucho antes que cualquier otra persona que trabaja en oficinas. La mejor forma de trabajar cuando tienes a un niño pequeño en casa, es hacerlo mientras está dormido.
Esto significa que tendrás que levantarte por lo menos dos horas antes de que se despierte tu pequeño. Podrás trabajar más y mejor, Sin distracciones durante ese tiempo. Aunque ahora te cueste ver los beneficios, cuando comiences a madrugar te darás cuenta de lo productivo que resulta. Si no eres una persona madrugadora, levantarte temprano todavía puede ser útil. Puedes tomarte una taza de café y aprovechar este tiempo para organizarte, responder a los correos electrónicos y organizar cómo será tu día.
Fomenta el juego independiente
El juego independiente es importante para el desarrollo de los niños pequeños y es bueno que se fomente. Para los padres que trabajan, el juego independiente en los hijos es una oportunidad para poder adelantar en el trabajo y ser productivo/a. Una caja con juguetes es una buena forma de alentar a un niño pequeño a sacar su curiosidad y su vena exploradora y que sea capaz de mantenerse ocupado por un pequeño tiempo… ¡que para ti será oro!
Contrata a una niñera o ayudante en casa
Si llevar a tu hijo pequeño a la guardería no te llama hasta que sea más mayor o no quieres llevarle hasta que comience la escuela infantil, entonces puedes pensar la opción de contratar a una niñera o a un ayudante en casa. En ocasiones para que puedas trabajar necesitarás la ayuda de otra persona.
Aunque dependerá de tu situación, existen soluciones para poder trabajar con tu hijo pequeño en casa. Puedes pensar en contratar a una niñera de día, a una ayudante que venga pocas horas al día un par de veces a la semana, etc. Lo ideal es establecer una rutina regular con la niñera para poder organizar mejor tu tiempo laboral y que tu hijo también sepa qué ocurrirá cada día, así se sentirá más tranquilo también.
Habla con otras mamis que trabajen desde casa
Si conoces a otra persona que trabaje desde casa cerca de ti, podéis llegar a un acuerdo. Por ejemplo, una madre se puede llevar a los niños al parque para que la otra madre pueda trabajar y después, en otro período de tiempo del día, la otra madre se encarga de los niños para darles la merienda o jugar en el jardín, por ejemplo, y así la otra mamá también puede trabajar (madres o padres… cualquier progenitor que requiera de tiempo para poder trabajar desde casa y adelantar). Además de tener tiempo para trabajar, tus hijos los pasan en grande con otros niños o saliendo del escenario de: ‘estoy en casa mientras mamá (o papá) acaba de trabajar’.
El tiempo de la siesta es oro
Cuando eres un padre o una madre que trabaja desde casa, el tiempo de la siesta se convierte en oro entre tus manos. Que los niños duerman la siesta todos los días es bueno para su salud y desarrollo, pero también es fundamental para ti y para tu salud mental.
Anima a tus hijos cada día, aunque sea un par de horas (sin pasarte tampoco o cuando llegue la noche no dormirán nada). Mantén los tiempos de siesta constantes dentro de sus rutinas diarias y de paso, aprovecha ese tiempo para poder trabajar y rendir el máximo partido. Esta idea es sobre todo para aquellos padres y aquellas madres que no les gusta madrugar, porque si te levantas muy temprano por la mañana, cuando llega la hora de la siesta no querrás trabajar porque necesitarás descansar.
Tu hijo también necesita tu atención
Trabajar desde casa tiene grandes beneficios para los padres, siempre y cuando se quiera hacer y se sepa cómo hacerlo con disciplina y buena organización. Dejar el trabajo de oficina no siempre es posible y quizá tampoco quieras hacerlo en realidad. Es una decisión que debes tomar a conciencia.
Si cuando estás en casa tu hijo llama tu atención, es normal, él no entiende que si estás en casa estás también trabajando, por lo que es más que probable que no detenga su comportamiento hasta que haya logrado llamar tu atención.
Tu hijo también te necesita, por lo que dentro de tu organización diaria de trabajo, también necesitarás prestar a tu hijo la atención que merece. Establece límites de horarios y compensa las horas del trabajo con horas libres de descanso, para que puedas dedicártelo a ti mismo/a y también a tu familia. La mayor ventaja de trabajar desde casa es poder pasar tiempo de calidad con la familia, así que asegúrate de que aprovechas eso también.