Los videojuegos no siempre han gozado de buena fama y por eso los padres nos mostramos preocupados cuando nuestros hijos se interesan por ellos. Es innegable que existen ciertos aspectos negativos que debemos controlar, sin embargo, los beneficios de los videojuegos para niños son numerosos.
Los videojuegos resultan adictivos y en esta característica reside el mayor riesgo. Pero bajo una correcta supervisión para evitar dependencias y obsesiones proporcionan algunos beneficios interesantes: horas de diversión y el desarrollo de determinadas habilidades cognitivas.
Beneficios de los videojuegos
Los videojuegos tienen un gran componente lúdico. Son una forma mas que tienen los niños para divertirse y como ocurre con cualquier otro juego somos los adultos los que que debemos comprobar que su contenido sea adecuados para su edad y que se haga un buen uso de ellos. Si así lo hacemos, estos pueden ayudarles a desarrollar algunas habilidades tanto cognitivas como sociales:
- Afina la coordinación ojo-mano. O lo que es lo mismo ayudan a desarrollar el control coordinado del movimiento del ojo con la reacción de la mano.
- Mayor agudeza visual. Las personas que juegan videojuegos suelen tener una mayor agudeza visual. Es decir, tienen una mayor capacidad para reconocer los objetos y formas en las imágenes que observa incluso estando estas en movimiento o veladas.
- Entrenan la atención. Niños que son incapaces de prestar atención a otros elementos o actividades durante varios minutos, consiguen hacerlo con los videojuegos porque les resultan motivadores. En un videojuego, además, existen numerosos elementos en pantalla y sonidos que compiten por la atención y que obligan al niño a cambiar el foco para avanzar.
- Desarrollan habilidades visoespaciales. Muchos juegos se desarrollan en escenarios virtuales en 3D, por lo que mientras los recorren los niños tienen la oportunidad de practicar sus habilidades visoespaciales, y por lo tanto entender mejor la distancia y el espacio.
- Razonamiento lógico. Los videojuegos están llenos de retos que deben ser resueltos. Algunos exigen al niño trabajar en diferentes razonamientos para tomar decisiones sobre las acciones van a llevar a cabo par poder avanzar. Algunos investigadores van mas allá y dicen que los niños mejoran en tres áreas: planificación, organización y pensamiento flexible, pero no hay evidencias de que después puedan aplicarlas a la vida real.
- Consolidación de la lectoescritura. En aquellos en los que la narrativa tiene un mayor peso, los videojuegos les permitirán trabajar la comprensión oral o escrita. Los videojuegos de aventura gráfica son especialmente interesantes para ello.
- Tolerancia a la frustración. No avanzar al ritmo que ellos quisieran o no alcanzar el nivel que ostentan sus amigos puede resultar frustrante para los niños. Y esta es una buena oportunidad para trabajar la tolerancia a la frustración. Porque gracias a la motivación que los videojuegos les generan, puedes estar segura que tras el enfado o la rabieta inicial, seguirán intentándolo.
- Juego en equipo. Hace mucho que los videojuegos dejaron de ser un juego solitario. Las redes han permitido que además de compartir el segundo mando con un amigo, los niños puedan jugar online con otros. Pueden así convertirse en un patio virtual en el que se establecen relaciones, se intercambian trucos o se unen fuerzas para ganar.
No te olvides de…
Los beneficios son numerosos, sin embargo, como padres debemos asegurarnos de que se juegue bajo ciertos criterios para evitar que los beneficios queden ensombrecidos por los inconvenientes. ¿Y cuales son esos criterios?
- Establecer horarios para los videojuegos que no superen la hora para menores de 10 años y las 2 horas para los mayores y acordar las consecuencias si no se cumplen. Es importante que sean ellos quienes se responsabilicen de cumplir los horarios y que no les amenacemos si no lo hacen. En esos casos bastará con recordarles las consecuencias y cumplirlas.
- Escoger videojuegos adecuados a su edad y supervisar o acompañar en el juego cuando son pequeños.
- Explicar el porqué de respetar los horarios, la importancia de no jugar en línea solos, ni compartir información privada.
- Ofrecerles alternativas atractivas para que no solo quieran jugar a videojuegos.
Estos criterios son muy importantes para evitar malentendidos, riñas, peleas… Para ello, eso si, deben ser explicados también a los niños, de forma que ellos entiendan lo que deben y no deben hacer, por qué y cuales son las consecuencias de incumplir lo acordado.