Durante el embarazo se producen diferentes momentos que hacen que sea cada vez más especial. El primero de todos es el positivo en el test de embarazo, con él comienzan todos los sueños, los planes e ilusiones que irán creciendo a medida que avanza el embarazo. Poco a poco se irán produciendo momentos inolvidables, como la primera ecografía, escuchar los latidos del corazón del futuro bebé y por supuesto, las pataditas del bebé.
Comenzar a sentir los movimientos del bebé es un hito fundamental para la pareja que espera un bebé. Para la madre es algo diferente, porque lo siente dentro de sí misma y con ello se siente una emoción indescriptible. Por ello es muy importante involucrar al otro progenitor, dejar que coloque sus manos sobre la barriga y buscar la manera de que pueda sentir también esas pataditas del bebé.
Las pataditas del bebé
Para la embarazada los movimientos del bebé comienzan a sentirse hacia semana 18, aunque para cada mujer puede ser diferente. Algunas lo notan antes, especialmente las madres que no son primerizas porque tienen más facilidad para detectar los movimientos. Otras en cambio empiezan a sentir al bebé mucho después, pero tan solo se trata de una percepción que comienza como pequeños calambres y no siempre es fácil de detectar.
En cuanto al padre, para que pueda notar las pataditas o los movimientos del bebé es necesario esperar algo más. Hasta que el feto no va tomando tamaño es algo más complejo sentir los movimientos, porque no se aprecian en la barriga a través de la placenta. Generalmente es algo que puede ocurrir entre la semana 18 y la 32, aunque lo habitual es que esto se produzca hacia la mitad del embarazo. Cuando la barriga ya es muy evidente y el tamaño del bebé hace que se perciban sus movimientos a través de ella.
Se trata de un momento muy especial, que causa mucha emoción y ayuda a los padres y al resto de personas que viven el embarazo desde un segundo plano. Por ello, procura involucrar al padre, deja que toque tu barriga cuando sientas que el bebé se mueve y así podréis compartir nuevas sensaciones en pareja.