Después del parto el cuerpo necesita tiempo para su recuperación. No hay prisa por perder el peso que se ha cogido durante el embarazo, ya que lo principal es recuperarse. Sí es cierto, que si decides ofrecer la lactancia materna hay más posibilidades de eliminar el peso cogido y demás. No obstante, analizaremos si dar el pecho adelgaza o no, y cómo seguir una dieta saludable para una perfecta recomposición.
Hay mujeres que deciden volver a su peso inicial durante los 6 y 12 meses posteriores al parto. La mayoría de las mujeres pierden la mitad del peso en las primeras 6 semanas después al nacimiento de su bebé. El resto de kilos y demás, se eliminan en los siguientes meses. ¿Hay que hacer alguna dieta especial o dando el pecho es suficiente para adelgazar? Para conocerlo haremos algunas valoraciones.
¿Qué ocurre después de tener al bebé?
Cuando una mujer da a luz inmediatamente baja algo de peso. Entre el peso del bebé, el líquido amniótico y la expulsión de la placenta ya hacen un conjunto de kilos que son eliminados.
La alimentación de la madre dependerá de los primeros meses. Hay que tener cuidado con la dieta que se suplementa, ya que debido a atender una nueva vida y la nueva ansiedad de dar el pecho puede que la alimentación se descuide a base de azúcares y grasas que no convienen. Si se sigue una dieta correcta y sin este tipo de excesos se podrá bajar de peso correctamente.
Lo ideal es poder adelgazar alrededor de medio kilo a la semana, habiendo consumido siempre alimentos saludables y pudiendo hacer algún tipo de ejercicio suave, siempre que se pueda realizar.
¿Dar el pecho al bebé adelgaza?
Dar el pecho adelgaza, ya que es un alimento que la propia madre construye dentro de su cuerpo y está transformando para servir de nutriente para su hijo. Una mujer que está amamantando necesita tomar unas 500 calorías demás al día, pero han de ir tomadas de forma saludable, siempre en forma de verduras, fruta, frutos secos, legumbres y proteínas.
Algunos especialistas apuntan a que dar el pecho ayuda a adelgazar, además, cuanto más amamantemos mayor será su reducción. La mayor bajada de peso se observará durante los primeros 3 meses y después se hará de forma más graduada. Una mujer puede llegar a recuperar su peso inicial alrededor de 1 año después de haber dado a luz. No hay que hacer dietas estrictas, pero sí llevar una alimentación completa y equilibrada.
Otra de las partes que también ayudan es la de realizar ejercicio físico afín a su estado. Algunos de los ejercicios recomendados pueden ser nadar, caminar o montar en bicicleta, ya que no programas de ejercicio que no crean un gran impacto.
Consejos extra para una pronto recuperación
Como consejos a añadir hay que tomar mucha agua y tomar ese extra de calorías sobre todo cuando se está haciendo algo de deporte. Si hay molestias en el pecho al hacer ejercicio se puede colocar un buen sostén para que porte una gran sostenibilidad. De igual forma, se puede extraer un poco de leche antes de hacer ejercicio.
Hay que tener presente que la parte más difícil de recuperar es la zona del abdomen, ya que se creó una zona distendida de sus músculos y por lo tanto más susceptible a acumular grasa. De ahí que se quede como una de las partes más blandas e hinchadas y la mejor forma es recuperar esta zona con ejercicios de abdominales. Pero hay que tener cuidado con las mujeres que han tenido cesárea durante su parto.
La lactancia materna es el mejor alimento par tu bebé y es una parte imprescindible e irremplazable, ya que es lo mejor para el crecimiento y desarrollo del niño. Se recomienda prolongarla a lo largo de 6 meses y continuar con ella si no supone ningún problema.
Si no se puede dar el pecho al bebé no hay problema, siempre se puede sustituir su alimentación con leches de fórmula especiales para su desarrollo. En este caso, la madre deberá seguir igualmente una alimentación equilibrada para poder bajar de peso de forma gradual, ya que lo importante no es bajar de peso de forma drástica porque podría sufrir una mala recuperación de su cuerpo.