Podemos considerar que ante las posibles infecciones urinarias siempre es más propenso presentarse más en mujeres que en hombres. Cuando se padece es una infección de orina suele ser bastante molesta, sobre todo por el picor, ardor e incluso dolor y se puede convertir mucho más incómodo durante un embarazo.
Según un estudio realizado por especialistas que tratan el tema en cuestión determinan que al menos una de cada tres mujeres sufrirá al menos, una infección de orina a lo largo de su vida. Pero el tema en cuestión está más centrado durante el embarazo y se puede concretar que durante su gestación una mujer puede llegar a sufrirlo con más frecuencia.
¿Es más común tener infección de orina durante el embarazo?
Aumenta más las posibilidades de padecer una infección de orina en el embarazo. Su incidencia es mucho más propensa en mujeres primerizas o quien han tenido muchos embarazos sucesivos. Incluso está más sujeto a ser visto en mujeres que ya hayan padecido esta infección con anterioridad. Algunos de los cambios durante la gestación hacen que se se esté más expuesto a este tipo de infección, con factores como los siguientes:
- Las mujeres durante su período de gestación sufren de cambios anatómicos y fisiológicos en las vías urinarias, por lo que este tipo de variaciones pueden desencadenar el ser más propenso a padecer una infección. El pH de la orina cambia y se vuelve menos ácida por lo que es más proclive a contener más glucosa y como consecuente de la proliferación de más bacterias.
- El alto nivel de progesterona es la causante de la relajación del tono muscular de los uréteres, todo lo relacionado con los riñones y la vejiga. Conlleva a que el flujo de la orina sea mucho más lento incluso a veces no se llega a conseguir por completo su evacuación por lo que existe el reflujo. Las bacterias al recorrer con más lentitud estos conductos hacen que las bacterias se multipliquen y provoquen una posible infección.
- Las bacterias, hongos, parásitos y virus son algunos de los microorganismos causantes de la infección de orina. En más del 80% de los casos la bacteria Escherichia Coli, que se encuentra alojada en el intestino, es la causante de esta infección y la responsable de esta dolencia.
Síntomas de la infección de orina en el embarazo
Los principales síntomas suelen comenzar por un ardor o picor al orinar, incluso en algunas de las veces la micción suele ser dolorosa. La sensación o necesidad de orinar se suele acentuar, aunque no se tenga la vejiga vacía y se suele sentir un pequeño dolor en la parte baja de la pelvis.
La orina suele ser mucho más turbia y desprenden un mal olor. En casos más extremos se suele orinar sangre o pus, llegando a tener dolores de espalda con escalofríos y fiebre. La fatiga y debilidad suelen estar muy presentes incluso a veces se suele manifestar en vómitos.
Ante la presencia de cualquiera de estos síntomas es fundamental acudir lo antes posible a un médico para que se haga una posible prueba, evaluar la situación y determinar el mejor tratamiento para este tipo de estado.
Consejos para prevenir la infección
Se pueden realizar una serie de consejos para poder prevenir, aunque no llegan a ser al 100% efectivas, tan sólo reducirán esa probabilidad: beber mucha agua, hasta unos dos litros, no aguantar las ganas de ir al baño por mucho tiempo, hay que orinar con frecuencia. Cuidar la higiene íntima en la zona genital, tanto cuando vayas al baño o sobre todo después de mantener relaciones sexuales.
Hay que intentar que la zona genital siempre esté seca, no dejar los bañadores mojados durante mucho tiempo y siempre vestir con prendas transpirables y que sean de algodón. La toma de arándano rojo también puede ayudar a prevenir, es un alimento natural que se puede tomar tanto en zuño, como en cápsulas y no presenta ninguna contraindicación en el embarazo. Si quieres saber más sobre cómo es una infección en el embarazo lee nuestro artículo pinchando en este enlace.