Durante los primeros meses de tu bebé es esencial que esterilicemos los biberones que utiliza el bebé, de esa manera nos aseguramos no transmitirle ninguna bacteria al bebé. Las mamaderas deben esterilizarse completas, con las tetinas y las tapas. También podemos incluir los chupetes. En el caso de los biberones deben esterilizarse luego de cada uso.
La forma más casera de esterilizar las mamaderas es poniéndolas en una olla grande con agua en estado de ebullición y dejarlas hervir durante diez minutos. El agua debe cubrir las mamaderas y debes dejarlas enfriar dentro de la olla. Luego, puedes guardarlas en un recipiente en la heladera para conservar la esterilización. Lo ideal es que utilices esa olla sólo para esterilizar los biberones. Por supuesto, debes poner las mamaderas a hervir una vez que la hayas lavado con agua caliente y detergente neutro.
Tambiés debes lavar tus manos cada vez que vayas a preparle el biberón al bebé.
Las mamaderas pueden ser de vidrio o de plástico, ambas son aptas para la esterilización, aunque para los primeros meses se recomiendan las de vidrio porque son más fáciles de limpiar.
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