Un bebé de dos meses, identificado por su familia como José Fabricio, falleció tras una cirugía programada en el Hospital Militar de Asunción. La intervención, prevista para tratar una hernia inguinal, culminó con complicaciones posteriores que no pudieron revertirse pese a los intentos de reanimación, según los testimonios recabados.
Los progenitores denuncian presunta negligencia médica y el Ministerio Público abrió una investigación. La fiscala Claudia Penayo dispuso el traslado del cuerpo a la Morgue Judicial para la realización de la autopsia y la incautación de la carpeta clínica original.
Cronología de la intervención y el desenlace
La madre, Leila Ortega, relató que el niño ingresó al quirófano alrededor de las 07:30 y que, a la media hora, el cirujano le comunicó que la operación había sido un éxito. Le pidieron aguardar para volver a verlo, pero, tras un tiempo sin novedades, fue informada de que su hijo había sufrido un paro cardiorrespiratorio y estaba siendo reanimado.
Entre la angustia y la falta de respuestas inmediatas, la familia asegura que cuando intentó acceder a más información se le indicó que los profesionales estaban centrados en la maniobra de reanimación. Pese a los esfuerzos del equipo, el bebé no logró sobrevivir.
Desde la dirección hospitalaria se indicó que la intervención fue por hernia inguinal bilateral, mientras que la familia sostiene que únicamente se había autorizado la cirugía del lado derecho. Este punto será contrastado con la documentación clínica y los resultados periciales.
Acciones de la Fiscalía y examen forense
La fiscala Claudia Penayo ordenó el traslado del cuerpo a la Morgue Judicial y la realización de la autopsia a cargo del médico forense Pablo Lemir. El especialista adelantó que se hallaron elementos “relevantes” para la causa, pero, por disposición fiscal, la investigación quedó bajo secreto de actuación en virtud de los artículos 322 y 323 del Código Procesal Penal.
De acuerdo con lo informado por el forense, los detalles se comunicarán primero a los padres y, una vez cumplidas las diligencias necesarias, se darán a conocer a la prensa. La carpeta clínica fue remitida a la Fiscalía para su análisis integral.
Medidas en el Hospital Militar
El director del centro, Darío Fretes, confirmó la suspensión preventiva y apertura de sumario para el cirujano Carlos Schaerer y el anestesiólogo José Morel, quienes quedan apartados de sus funciones mientras avanza la auditoría interna. La institución expresó su consternación y aseguró “colaborar plenamente” con el Ministerio Público.
Según la versión oficial, la cirugía “concluyó con éxito” y las complicaciones surgieron en el periodo inmediato posterior. La auditoría revisará los protocolos de anestesia, monitorización y respuesta ante emergencias en el posoperatorio.
Aspectos que se investigan
- Causa exacta de la muerte y si el paro cardiorrespiratorio se produjo durante la recuperación.
- Alcance de la intervención: si correspondía una cirugía bilateral o solo del lado derecho, como sostiene la familia.
- Manejo anestésico y monitorización intra y posquirúrgica, tiempos de respuesta y medidas de reanimación aplicadas.
- Comunicación con los familiares y acceso a información clínica durante el proceso.
Qué se sabe por ahora
La Fiscalía Barrial N.º 3 encabeza las diligencias, mientras el informe de autopsia se mantiene reservado. Los resultados periciales serán clave para determinar si existió negligencia y, en su caso, eventuales responsabilidades. La familia insiste en esclarecer por qué, pese a que inicialmente se reportó una cirugía “sin incidencias”, el menor presentó un paro minutos después.
El caso ha generado gran impacto institucional y social. A la espera de los dictámenes médico-legales y la revisión de la historia clínica, las autoridades sanitarias y judiciales mantienen la investigación enfocada en los hechos verificados y la trazabilidad del procedimiento, con el compromiso de informar primero a los padres y posteriormente al público.