La fecundación in vitro se basa en implantar los embriones al útero materno, conseguidos al unir óvulo y espermatozoide en el laboratorio.
Un porcentaje de mujeres, debido a determinadas circunstancias, tienen a sus hijos por fecundación in vitro. En este artículo vamos a conocer más acerca de esta técnica y en qué consiste.
¿Qué es la fecundación in vitro?
La fecundación in vitro es una técnica de reproducción asistida. Se dirige a mujeres que no pueden quedarse embarazadas de forma natural o cuyas parejas tampoco logran inseminarlas óptimamente, es decir, para lograr el embarazo. Algunas de estas mujeres tienen problemas en las trompas de Falopio, de ovulación o endometriosis entre otros. Los hombres problemas con su esperma. Otro tanto por ciento de mujeres que solicitan esta técnica no tiene pareja, desea formar una familia en solitario y será inseminado gracias a un donante.
Este tratamiento, por norma general, se practica a mujeres que previamente han probado otras técnicas de reproducción y no logran la fecundación del embrión. El procedimiento se basa en implantar los embriones al útero materno, conseguidos al unir óvulo y espermatozoide. por los técnicos de laboratorio. El espermatozoide puede unirse al óvulo como es normal o bien el médico puede inyectarlo directamente en el óvulo. La eficacia depende de la edad que tenga la mujer, del número de embriones transferidos y de la cantidad de ciclos que se realicen.
¿En qué consiste?
La mujer es controlada clínicamente y tras reunir los requisitos, pasar por pruebas y procesos médicos, se le realiza la prueba de embarazo para confirmar o descartar el embarazo.
Antes de comenzar el tratamiento hay que realizar un estudio para averiguar si la mujer es apta para esta técnica de reproducción asistida. El tratamiento de fecundación in vitro dura alrededor de 20 días. La mujer será evaluada y controlada con analíticas y pruebas transvaginales para analizar sus niveles hormonales y el tamaño de los folículos de los ovarios. Cuando los valores son los idóneos se le pone una inyección para que los ovocitos maduren. A continuación, bajo sedación de la mujer, el embriólogo buscará embriones que pueda separar.
En primer lugar hay que estimular los ovarios. A la mujer se ponen unas inyecciones para que produzca mayor número de ovocitos para lograr también más embriones. En el caso de no producir óvulos, la mujer puede disponer de óvulos de donante. Por otra parte será necesaria una muestra de semen de la pareja o del donante, según el caso particular. Tras tener las dos muestras se mezclan y se obtendrán embriones. Los aptos se transfieren a la mujer a través del cuello del útero. Otros pueden reservarse para posteriores ciclos, en el caso de precisarse. La mujer será tratada con medicamentos y alrededor de 15 días se le hará la prueba de embarazo.