El primer paso para diagnosticar por qué una pareja no consigue concebir es realizar un estudio de la fertilidad. Estos incluyen distintas pruebas, entre éstas el análisis tiroideo. La tiroides es una glándula con un papel fundamental en la función reproductora. Esta se encuentra en el cuello y su función es regular el metabolismo.
Tanto el hipertiroidismo como el hipotiroidismo, si no son tratados, afectan a la fertilidad masculina y femenina. Por eso en el marco del Día Mundial de la Tiroides, hacemos una llamada de atención para detectar estos desequilibrios. Si eres mujer recuerda que si la disfunción de la tiroides no se trata, ésta puede causar varios problemas de salud, que a su vez dificulten el quedarse embarazada, como la obesidad, por ejemplo.
¿Cómo afectan las hormonas tiroideas a la fertilidad?
Las alteraciones de tiroides se dan tanto en mujeres como en hombres, aunque en estos en menor medida. Un desequilibrio en cualquiera de los dos individuos de la pareja produce infertilidad. Cuando hay un mal funcionamiento de la glándula tiroides, todo el sistema endocrino se descompensa.
En el caso de las mujeres, las hormonas tiroideas interactúan con las hormonas sexuales femeninas, los estrógenos y la progesterona, que mantienen el normal funcionamiento de los ovarios y de la maduración de los óvulos. En los hombres, las alteraciones tiroideas influyen en la producción y maduración de los espermatozoides. El mal funcionamiento de la glándula del tiroides, en los hombres, provoca teratozoospermia.
Este trastorno no se puede prevenir, pero sí se puede controlar la afección y mejorar su salud manteniendo un buen estilo de vida. Algunos de los consejos que podemos darte es dormir lo suficiente, comer una dieta saludable, hacer ejercicio, eliminar el estrés y prestar atención a los síntomas tempranos y, por supuesto, obtener la atención médica necesaria.
Hipotiroidismo e hipertiroidismo en las mujeres
Ya sea por exceso, hipertiroidismo, como por defecto, hipotiroidismo, de hormonas tiroideas hay problemas de infertilidad. En la mujer hay muchas dificultades para lograr un embarazo, llevarlo a buen término, con frecuencia se dan los abortos espontáneos. Además si no se controla durante la gestación puede provocar el parto prematuro.
Tanto hipotiroidismo e hipertiroidismo se asocian a la anovulación y ciclos menstruales irregulares. Tras el estudio, si estos niveles no son adecuados el especialista le recomendará ingerir yodo, en alimentos como el pescado, pan, queso, leche de vaca y huevos. Además, los especialistas valorarán el tratamiento para recuperar los niveles normales hormonales.
Si con la medicación hormonal no se controla, lo recomendable es recurrir a un tratamiento de reproducción asistida. Una vez conseguido el embarazo, es muy importante seguir acudiendo periódicamente al especialista y llevar un seguimiento de la glándula tiroides para mantener los niveles hormonales controlados.
Problemas de tiroides y fertilidad masculina
Aunque no es tan común como en las mujeres, el hipertiroidismo o hipotiroidismo también se da en los hombres. De la misma manera afecta a la fertilidad masculina. Ya hemos señalado que son la causa de la malformación de los espermatozoides, además de influir en la producción y maduración de estos. Siempre van a ser los médicos quienes seleccionarán la línea de tratamiento en función de la causa subyacente del mal funcionamiento de la tiroides, como la edad, el tamaño de la glándula y la presencia de afecciones médicas coexistentes.
Por otro lado, problemas en la tiroides también pueden provocar disfunción eréctil y disminución de la libido, el hipotiroidismo también se asocia a la depresión, pérdida de cabello y memoria. Algunos de los síntomas evidentes de estos trastornos del hipotiroidismo son la fatiga, aumento de peso, hinchazón de la cara, frecuencia cardíaca lenta, dolor en las articulaciones.
Estos síntomas se van presentando gradualmente con el tiempo, y, en los hombres, en ocasiones, se diagnostican como síntomas de envejecimiento. Pero si el hipotiroidismo no se trata puede llegar a causar bocio, enfermedades del corazón, problemas mentales, y daños en los nervios.