Estamos viviendo un momento en el que, cada vez más padres y madres se preocupan por establecer hábitos saludables en los niños. Pero también es cierto que los padres, no siempre nos acordamos de dar ejemplo a nuestros hijos, y nos olvidamos de nuestros propios hábitos saludables. Para que los niños aprendan de forma firme, es importante que vean el ejemplo como enseñanza.
Es importante establecer ciertas rutinas familiares, que fortalezcan los vínculos afectivos. Para ello puedes empezar a establecer ciertas normas y planes para realizar todos juntos. De esta forma estarás cuidando del bienestar no solo de tus hijos, si no también de vosotros como padres. Porque tus hijos necesitan a sus padres sanos y fuertes, capaces de cuidarlos bajo cualquier circunstancia.
A continuación encontrarás una serie de consejos para establecer rutinas familiares, pero es solo una idea que puedes adaptar a tus circunstancias. Todas las personas no tenemos los mismos gustos ni las mismas necesidades, por lo tanto, toma esta lista como una simple inspiración.
Alimentación saludable y en familia
Seguro que te preocupas por alimentar a tus hijos de forma sana y equilibrada. Pero ¿ tu te alimentas de la misma forma? Es fundamental que toda la familia se alimente bien, si te preocupas de que tus hijos tomen fruta y verdura cada día, hazlo tu también. Además, es importante realizar alguna comida al día en familia. Siempre que podáis, sentaros todos juntos a la mesa y compartir un momento juntos.
Cuando no comemos frente a la televisión, nos alimentamos mejor pero si además lo haces junto a tus hijos, podrás conocerlos mejor. Prepara la mesa para cenar todos juntos y hablar sobre como ha ido el día. De esta forma conocerás más profundamente el día a día de tus hijos, y te servirá para conocer mejor su personalidad. Descubrirás lo maravilloso que es una sobremesa en familia sin ruidos de fondo.
Practicar deporte es cosa de todos
Llevar a los niños al parque y dejar que corran mientras tu esperas sentada en un banco, no puede considerarse como pasar tiempo en familia al aire libre. Para que esto sea una realidad, puedes organizar salidas al campo cada 2 domingos por ejemplo. Busca zonas de campo cerca de la zona donde vivas. Prepara unos bocadillos y botellas de agua y salid a explorar las zonas vegetativas.
Es una magnífica opción para realizar deporte todos juntos, además de pasar un tiempo de calidad en familia. No hace falta que salgáis muy lejos, cualquier parque que tenga espacios grandes con árboles y distinta vegetación servirá. Si lo hacéis con asiduidad, podrás enseñar a tus hijos como cambia la naturaleza con cada estación. Los niños lo pasarán en grande y aprenderán muchas cosas sobre la naturaleza.
Juegos en familia
La televisión se ha convertido en un miembro más de la familia, muchas veces lo tenemos encendido simplemente para tener un ruido de fondo. Pero lo cierto es que los niños ven demasiada televisión, aunque alguna vez todos lo hemos utilizado para tener un momento de tranquilidad, es poco saludable. Por ello, debemos recuperar aquellos juegos de mesa que tanto se utilizaban hace algunos años.
No es necesario gastar un dineral en juegos, un simple juego de la oca puede servir para pasar grandes tardes con los niños. También podéis jugar a las películas, un actividad perfecta para desarrollar la creatividad de los niños y enseñarles a mostrarse en público sin tener vergüenza.
Dedica unos minutos a realizar alguna manualidad con los niños. Los pequeños son grandes artistas y lo demuestran con sus originales dibujos y creaciones. Enséñales a hacer cosas más elaboradas, como una casa de muñecas reciclada o su propio cuento de aventuras.
Pero sobre todo, crea rutinas de forma positiva sin que resulte una obligación. Propón cada una de las actividades que quieras hacer con ellos de forma que les sea atractiva. Habla con tus hijos para saber qué les gusta hacer a ellos. Intenta que los hábitos de vida saludable sean en base a sus gustos y preferencias.