Hablemos sobre crisis de lactancia: porque la leche no se acaba ni se corta

Crisis lactancia

De entre las innumerables ventajas que tiene la lactancia materna (no sólo para el bebé, también para la madre), destaco lo que se nos contaba en este post del blog: ‘es buena para la salud y para el bolsillo’. Las condiciones actuales de vida, sin embargo, dificultan no sólo el establecimiento de muchas lactancias, sino su continuidad.

La evolución de los sistemas sociales nos han despojado de comunidades y familia extensa, cuyos miembros se apoyaban y ayudaban en diferentes tareas de la cotidianidad. La lactancia no era una excepción, los mejores consejos provenían antes de mujeres más experimentadas que las nuevas madres. No estoy diciendo que los cambios hayan sido en conjunto negativos, pero hay mamás que se sienten solas, que no tienen suficiente información, a las que les cuesta escuchar el instinto, sin referencias, algunas incluso se topan con profesionales de la salud que ofrecen consejos desactualizados e inútiles (porque no sirven para el propósito que se pretende)… Uno de los ‘problemas’ más comunes con los que mamás de bebés recién nacidos se encuentran durante los primeros meses son las llamadas crisis de lactancia (crisis de crecimiento, si queréis).

Como introducía el titular de una consulta al foro del Comité de Lactancia de la AEPED: ‘lactancias maternas se pierden por falsos mitos’

Uno de esos mitos es la supuesta ‘falta de leche’, que en la mayoría de los casos es un caso de desajuste entre oferta y demanda. Suele suceder alrededor de las tres semanas, al cabo de un mes y medio (aproximadamente), y hacia los tres meses. Una máxima ‘de oro’ a recordar es que el pecho de una madre que amamanta ‘es una fábrica, no un almacén’. Es una frase que oí por primera vez hace 11 años, y ¡es cierto! Cuanto más estimula (demanda) el bebé succionando, más leche se produce; de hecho la leche materna es un alimento tan perfecto que no sólo ajusta su composición a las necesidades nutricionales del bebé, sino que hace lo mismo con la producción a los diferentes momentos del amamantamiento a través del tiempo.

¿Qué es una crisis de lactancia?

Dos de las acepciones de la palabra ’crisis’ en el diccionario de la RAE son: Escasez, carestía; y situación dificultosa o complicada. Por lo tanto no necesariamente hace referencia a una cosa imposible de resolver, tampoco tiene connotaciones negativas. Tan solo se trata de superarla. Estas son algunas de las características que apreciarás:

  • El bebé mama más a menudo y además se muestra inquieto, o llora sin motivo aparente.
  • Parece estar a disgusto con la producción ya que coge y suelta el pecho con frecuencia, también se retuerce.
  • Mamar más frecuentemente ocasiona que los pechos se vacían más pronto, ya no hay ‘subida de leche’, quedan blandos.
  • El peque se queda con hambre, también puede que se despierte más por las noches queriendo mamar.
  • La buena noticia es que en un par (o tres quizás) de días, tu producción de leche se va a regular, y el bebé no mostrará signos de quedarse con hambre, nerviosismo, etc.

    Coincidiendo con las crisis de lactancia…

    Si el bebé se queda con hambre, si está enfadado con los pechos que no le dan lo que necesita (repito: es cuestión de un par de días), también estará más falto de que lo cojan y lo lleven a brazos, y de contacto corporal, es de lógica. No hay nada de malo en que respondas la demanda.

    La crisis de los 3 meses puede coincidir con una disminución de las deposiciones, hay bebés que dejan de hacer caca a menudo, pero ten por seguro que no les ocurre nada ‘anormal’ (por lo general). El hecho de que disminuya la frecuencia de deposiciones, no quiere decir que está estreñido, pues la consistencia será similar a la de días anteriores. Si te quieres quedar más tranquila pregunta a alguien de confianza, al pediatra… pero no creas que debes estimular las deposiciones, porque de forma natural (al cabo de un tiempo) vuelven a manchar el pañal.

    ¿Qué puedes hacer?

    Tan fácil como poner al bebé más a menudo al pecho, ¿más aún?, sí, pero no te preocupes porque en breve vuelves a tener mucha leche y se vuelve a saciar rápidamente. Es la única manera de darle continuidad a la lactancia, simplemente estás pasando por una fase complicada.

    Sin embargo ofrecer no es obligar, ni ser demasiado persistente. Por otra parte puedes ver señales de inquietud que te indiquen que tiene hambre de nuevo: bostezos, llevarse la mano a la boca, mover la cabeza buscando el pecho. Si te esperas a que lleve rato nervioso, a que llore, lo pasaréis mal, porque no es una situación placentera, y quizás le cueste más el agarre.

    Otra cosa que puedes hacer es amamantar en semi oscuridad o con poca luz, para favorecer la relajación.

    Crisis lactancia

    ¿Es tan fácil?

    Tan fácil o tan difícil… para que sea fácil debes proveerte una red de apoyo, no intentes pensar que tú puedes llevarlo todo adelante sin ayuda, somos seres sociales y necesitamos de los demás. Seguro que tu pareja puede ir a hacer la compra y poner el lavaplatos; seguro también que tienes una madre o una amiga que de vez en cuando te lleva comida; seguro que hay un grupo de lactancia que te queda cerca, poder compartir dudas con mamás que pasan por lo mismo ayuda ¡y no sabes como!


    No hay nada de malo en dejarse mimar, además es que otra parte positiva de esto es que aunque estarás muy pendiente del bebé, también tendrás un poco de tiempo para tus pensamientos, tus lecturas, etc.

    Por último recuerda: en situaciones normales, y en la mayoría de los casos, la leche no se acaba, la leche no se corta. Lo único que necesita durante esas crisis de las que te hablo una mamá con ganas de amamantar es mucha comprensión del entorno. Casi tanta comprensión de los demás como acopio de paciencia debe reunir ella misma para con su hijo.

    No lo he dicho, pero es de lógica pensar que lo último que se debe hacer durante una crisis de crecimiento / lactancia, es ofrecer el biberón. La primera razón es que no es necesario, la segunda que las ‘ayuditas’ pueden acabar con la lactancia materna. Y por último, te recuerdo la app de la AEPED que te puede resolver ¡tantas dudas!

    Imágenes – Aexrefous, Summer


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    1.   Anto dijo

      Muy buen artículo…pero para las que trabajamos?? en mi caso ya le doy otra leche porque no me sale suficiente como para dejar a mi bebe

    2.   Macarena dijo

      Hola Anto, incoporarse al trabajo durante el período de lactancia, complica un poco las cosas es verdad. Si una madre quiere mantener la lactancia materna, quizás sea recomendable que se pida asesoramiento a un grupo de lactancia. Gracias por comentar.

    3.   Yurisley dijo

      Estoy pasando la crisis de los 3 meses y espero volver a recuperar mi prodiccion de leche. Gracias por este escrito; me ha servido de ayuda e informacion