Si estás embarazada y eres primeriza es bastante habitual que tengas miedo al parto… pero si no eres primeriza y ya tienes otros hijos, también puede tener este miedo. Son muchas las mujeres que temen este bonito y doloroso momento a partes iguales. Si esta es la primera, la segunda o la tercera vez que pasas por un embarazo, cada parto viene con un conjunto diferente de experiencias y en una fase diferente de tu vida.
No importa si otras veces ya has tenido partos, éste es diferente y deberás planificarlo igualmente, como si no. hubieras tenido otros partos anteriormente. Los miedos a las complicaciones o a que algo salga mal es algo que todas las mujeres embarazadas tienen… Nunca se sabe cómo irá un parto y por eso, sentir esto es absolutamente normal.
La incertidumbre
Pasar por la aprensión y no saber qué esperar es un sentimiento muy natural. Es, después de todo, un momento crucial en la vida de cualquiera. Una de las mejores maneras de contrarrestar los numerosos temores asociados con el parto es la preparación. Desde el inicio, ir al médico y hacerse todas las pruebas pertinentes para saber que todo irá sobre ruedas.
Uno de los aspectos más importantes que debes recordar, si no es el más importante, es reconocer tus temores, pero nunca permitirles que se aprovechen de ti… solo de ésta manera podrás hacerle frente. No podrás controlar ni anticipar cada paso de la forma en que se desarrollará el parto y esto debes aceptarlo cuanto antes.
Ten en cuenta las interminables transiciones y los cambios como una constante en todo el proceso. Experimentarás una amplia gama de emociones y cambios de humor como una montaña rusa constante. Se podría decir que el parto es como correr una maratón o escalar una montaña; todos sabemos que alcanzar el fin es el objetivo principal y que llegar en gran medida dependerá de la disposición para tener éxito. Se puede decir que la experiencia es única en la vida y, sin lugar a dudas, un sacrificio amoroso, sin importar cuánto dolor puedas o no experimentar.
Los miedos más comunes sobre el parto
Una vez que hayas detectado y confirmado tu embarazo, tendrás que ser honesta acerca de los temores que se aparecen dentro de ti. Piensa en esas preocupaciones abiertamente y háblalas con tu pareja, tus familiares y el equipo de médicos. ¿Cuáles son algunos de los temores típicos asociados con el parto? Los miedos no son infrecuentes para que tu cerebro los produzca.
Existen algunos miedos que son bastante habituales en todas las madres del mundo. Es buena idea que conozcas qué tipos de miedos son los que más se dan entre las mujeres embarazadas de todo el planeta. De esta manera, si crees que tienes alguno de estos miedos, sabrás que no estás sola, que es algo común y sobre todo, que son miedos que igual que llegan, se van marchando con el tiempo y con la llegada de tu bebé.
- Los miedos más habituales de las mujeres embarazadas del parto son:
- No saber cuidar al bebé una vez que haya nacido
- No tener privacidad
- Que no se les respete en el proceso del parto
- Hacer frente a cosas que no conocen
- No poder dar a luz de forma natural
- Que no puedan soportar el dolor
- No llegar al hospital a tiempo
- Que existan complicaciones que pongan en peligro su vida
- Que existan complicaciones que pongan en peligro la vida del bebé
- Que el bebé no esté sano
- Que existan intervenciones durante el parto que no sean deseadas
- Que no les permitan estar acompañadas por una persona de confianza durante todo el proceso
Lo más probable es que estos miedos no sean tan extraños para ti. Por ejemplo, tal vez sea un subproducto de la imaginación pensar que no puedes llegar al hospital o la clínica a tiempo para dar a luz. El trabajo del parto es un proceso largo, así que no te preocupes demasiado por si hay un atasco en la carretera, lo que importa es salir con tiempo.
Enfrentar lo desconocido o no saber cómo cuidar al recién nacido sin duda dará lugar a errores cometidos. Nadie está exento de errores y la única forma de aprender es a través de comprender lo que se hizo mal. Muchos de los temores que formulamos en ocasiones provienen de no saber lo suficiente y de imaginar escenarios en la mente que nunca ocurrirán. Tener dolor es normal y cada mujer lo experimenta de una forma diferente. Sin embargo, el cuerpo de la mujer está preparado para poder llevarlo a cabo… Te sorprenderás lo que es capaz del cuerpo de la mujer para traer vida al mundo.
También es habitual que una mujer sienta preocupación por las complicaciones o por la salud de su bebé. El cuerpo de la mujer sufrirá grandes cambios durante el embarazo y a veces la cesárea es inevitable, si no quieres episiotomía puedes trabajar la zona vaginal con masajes para que se vuelva más flexible. Cada miedo que tengas lo puedes manejar primer, aceptando que lo tienes. No niegues tus miedos, porque es importante que comprendas que el parto es un proceso complicado que tiene algunas condiciones indispensables, pero sobre todo… Es un proceso importante en el que debes estar todo lo tranquila que puedas.
Habla con tu médico para que te dé la información que necesites en todo momento. La información te ayudará a no tener tanta incertidumbre y sobre todo, a que con el paso de los días, te vayas quedando más tranquila para que cuando llegue el momento del parto, los nervios no te jueguen una mala pasada.
Cuando llegue el momento
Dar a luz te afecta a ti y también a las personas de tu alrededor. Es una experiencia de transformación que une y conecta a los seres humanos una y otra vez. Dado que la medicina y la tecnología han dado grandes pasos, puedes estar segura de que existen tratamientos en caso de una complicación mientras das a luz. Dar a luz es un evento muy bien estudiado. En el hospital habrán muchos profesionales que estarán a tu disposición pensando en todo momento en tu bienestar y en el de tu bebé.