Si estás embarazada, es más que probable que tu matrona o el médico que sigue tu embarazo, te habrá insistido mucho sobre la importancia de que camines. También es más que probable que, aunque lo intentas y le pones todo tu empeño, no caminas todo lo que deberías. Además, a medida que el embarazo avanza, se hace todavía más complicado salir cada día a hacer ejercicio.
Pues bien, hacer ejercicio durante el embarazo no es solo una recomendación, es que las ventajas son tantas que debería ser una obligación para todas las embarazadas. Es posible que no conozcas todos los beneficios que la actividad física tiene, para ti y para tu bebé. Por este motivo, vamos a repasar cuáles son todas esas ventajas para que te animes a caminar cada día y así, mejorar tu salud durante tu embarazo.
¿Qué tipo de ejercicio debe realizar una embarazada?
Antes de repasar las ventajas y que te pongas en marcha, es importante aclarar algunos puntos. Cada embarazo, cada mujer y cada cuerpo es completamente distinto, por lo tanto, antes de hacer cualquier actividad física es necesario que lo consultes con tu médico. Durante el embarazo, los deportes más recomendados en general son aquellos de bajo impacto. Entre los mejores se encuentra el yoga, que además ayuda a tu cuerpo a prepararse para el parto, el pilates o caminar.
Este último, es el ejercicio físico que más se recomienda en las embarazadas, por tratarse de una actividad suave que puede realizarse con facilidad. No solo durante el embarazo, caminar es la actividad más adecuada para todo el mundo, independientemente de la forma física, el peso o la edad. A pesar de ser la mejor actividad para ti durante tu embarazo, no te excedas y consulta con tu matrona cuánto tiempo es lo recomendable en tu caso.
Ventajas de caminar durante el embarazo
La principal ventaja de caminar es que lo puedes hacer en cualquier momento, no necesitas material específico, ni asistir a un gimnasio, ni hacer una inversión económica. Sólo necesitas ropa cómoda y un calzado adecuado y por supuesto, fuerza de voluntad. Una de las mejores formas de motivarte, es buscar un grupo de embarazadas y quedar para caminar juntas.
Entre todas os motivaréis y será mucho más fácil para todas, en tu centro de salud puedes conocer a mujeres en tu estado y además así, podrás hacer nuevas amigas con las que compartir las nuevas emociones y vivencias. Además, caminar te aportará estos beneficios:
Te ayudará a controlar el peso
Es muy importante controlar el peso durante el embarazo, y aunque te alimentes muy bien, el sedentarismo te impedirá llevar un buen control de los kilos. Caminar cada día te ayudará a controlar los kilos que coges, ya que perderás calorías sin apenas darte cuenta y así podrás contrarrestar el peso que cogerás de forma natural. Además, podrás reducir el riesgo de sufrir enfermedades como la hipertensión, la diabetes o la obesidad.
Preparas tu cuerpo para la recuperación tras el parto
Tu cuerpo estará tonificado y te resultará más fácil recuperarte después del parto. Tendrás mucha más resistencia porque en general, habrás logrado una buena forma física y perder el peso será mucho más sencillo para ti. Además, al haber controlado de forma eficaz el aumento de peso, no tendrás demasiados kilos que perder.
Favoreces el trabajo de parto
Mientras caminas, se produce un movimiento pélvico a la vez que se mejora la musculatura de toda la zona. Además, se fortalece la musculatura de las piernas, de forma que tu cuerpo estará más preparado para el trabajo de parto.
Se mejora la circulación de la sangre
Algo fundamental para evitar la aparición de edemas, lo que se traduce en inflamación en las piernas y los pies, además de las molestas hemorroides.
Pero además de todas estas ventajas, caminar y realizar cada día ejercicio físico tendrá un importante impacto sobre tu estado emocional. Los cambios hormonales pueden causar estragos en tu estado emocional, pero mantenerte activa te ayudará a sentirte mejor contigo misma por la producción de endorfinas.