Los beneficios de comer salmón durante el embarazo

Comer bien durante el embarazo es esencial para que el feto se desarrolle correctamente durante todo el periodo de gestación. Todos los nutrientes son importantes, pero algunos en concreto son mucho más importantes por el papel fundamental que juegan en el desarrollo del futuro bebé. Los ácidos grasos esenciales son uno de esos nutrientes tan importantes.

Esto es porque el propio organismo no los puede sintetizar y al ser necesarios para que pueda realizar ciertas funciones, deben obtenerse a través de los alimentos. Este grupo de nutrientes forman parte de la estructura de las membranas celulares, además, son necesarios para que el organismo sintetice las prostagladinas, que intervienen en muchos procesos biológicos.

Entre los ácidos grasos esenciales se encuentran los omega-3 y los omega-6, que se encuentran en gran medida en los mamíferos. Estos nutrientes juegan un papel fundamental en el embarazo, ya que intervienen en diferentes factores del desarrollo del feto, por ejemplo:

• El desarrollo cerebral: los ácidos grasos omega-3 favorecen el desarrollo cognitivo y neurológico.
• Intervienen en el desarrollo de la visión del futuro bebé.
• Esenciales para el sistema nervioso.
• Se reduce el riesgo de un parto prematuro: estudios médicos determinan que un gran porcentaje de mujeres que tuvieron un parto prematuro, presentaban bajos niveles de aminoácidos en el organismo.
• Menor riesgo de resfriados y otras infecciones en el bebé: los aminoácidos esenciales ayudan a fortalecer el sistema inmunitario del feto, reduciendo los riesgos de resfriados en el recién nacido.

El salmón, fuente natural de aminoácidos

Los beneficios del salmón para la dieta de la mujer embarazada son numerosos, ya que se trata de un pescado con grandes cantidades de ácidos grasos esenciales Omega-3. Una de las más importantes ventajas de comer salmón en el embarazo es que no contiene mercurio, una sustancia peligrosa en el embarazo que contienen los pescados de gran tamaño.

En este caso, el salmón es uno de los pescados azules ricos en omega-3 más recomendados durante el embarazo. Ya que, al ser un pescado de un tamaño inferior a otros pescados azules como el pez espada o el atún rojo, el riesgo de contener mercurio y otros metales pesados es mucho más bajo. Evitar este tipo de sustancia es muy importante, ya que puede resultar muy peligrosa para el desarrollo del feto.

Por otra parte, hoy en día la mayoría de los salmones que se consumen son criados en piscifactoría. Lo que reduce aún más el riesgo de que el pescado se contamine con metales pesados como el mercurio. Por lo tanto, el salmón es una de las fuentes más importantes de ácidos grasos omega 3 que se pueden consumir durante el embarazo.

Cómo comer salmón durante el embarazo

Aunque los beneficios de comer salmón durante el embarazo son numerosos, hay que tener mucha precaución a la hora de tomar este alimento. La mejor forma de tomar este pescado es cocinado, a la plancha o el papillote al horno. De cualquier forma que quede bien cocinado, ya que existe el riesgo de que el pescado contenga anisakis. Para evitar el riesgo, no tomes salmón ahumado ni cualquier otro tipo de pescado sin cocinar durante tu embarazo.

Esto incluye el sushi, un manjar para los amantes de la cocina asiática pero un gran peligro para las mujeres embarazadas. Durante el embarazo, todos los alimentos que se consumen deben estar perfectamente limpios. Especialmente los que se consumen en crudo como las frutas y las verduras. En cuanto a los productos de origen animal, ya sea carne o pescado el alimento debe consumirse siempre cocinado por completo.

Recuerda que tu bebé depende de los nutrientes que tú le proporciones a través de los alimentos que consumes. Una dieta equilibrada, variada y con alimentos de todos los grupos es la mejor manera de asegurar a tu bebé los nutrientes necesarios. Eliminando productos poco recomendables, sustancias nocivas y teniendo precaución a la hora de consumir algunos alimentos, tu bebé tendrá mayor probabilidad de crecer y desarrollarse correctamente.