Siempre que estamos embarazadas nos surgen un sinfín de dudas. Porque lógicamente solo queremos hacer lo propio para cuidar del bebé. Por eso, uno de los temás más polémicos aparece cuando pensamos en teñirnos o en aplicar mechas en el embarazo. Ya que somos muchas quienes no queremos lucir un pelo de canas y sí uno con un brillo especial.
Así que, si tienes estas mismas dudas que a mi también me generaban, es el momento de disiparlas. De manera que puedas disfrutar de un embarazo mucho más saludable pero sin llegar a la obsesión. Verás que no es tan complicado cuando las dudas se quedan atrás, comenzarás a vivir al máximo esta etapa.
¿Puedo darme mechas en el embarazo?
Lo cierto es que hay muchas opiniones alrededor de este tema, pero es cierto que lo mejor es tener un poco de prudencia. No hay un estudio que diga que no nos podemos teñir el pelo. Pero sí que podemos ser un poco precavidas por ese ‘por si acaso’. Aunque como decimos no hay alarmas de ningún tipo. Los tintes y productos derivados son bastante seguros hoy en día. Así que ya partiendo de ello sí que puedes darte mechas en el embarazo. Pero siempre con un poco de precaución. ¿Cómo? Lo mejor es esperar que pasen los tres primeros meses para estar todavía más seguras.
Qué tinte es mejor durante el embarazo
No hablamos de marcas en concreto pero sí de tipos de tintes que puedes usar. Por ejemplo, todos aquellos que no tienen amoniaco son perfectos para teñirte. Aunque creas lo contrario, déjame decirte que son muchas las opciones que te dejarán el pelo perfecto. Atrás queda la idea de que este tipo de tinte no cubría las canas, porque sí las cubre y bien. Quizás durante menos tiempo pero por lo menos, sabemos que estamos ante una opción más natural y que no va a perjudicar para nada a nuestro bebé. Por otro lado tienes los conocidos como vegetales y como no, la henna. Ninguno de ellos va a tener componentes tóxicos ni perjudiciales.
Las mechas son más seguras
En este caso tenemos que mencionar que las mechas son más seguras porque no llegan a tocar el cuero cabelludo. Digamos que es una coloración más superficial. Aún así, lo mejor es no estar mucho tiempo oliendo los vapores de los productos, por eso es aconsejable que siempre vayas a tu peluquería de cofianza, donde tendrán el salón más ventilado y evitarás problemas mayores. Sobre todo en el primer trismestre que es el momento en el que se forman los órganos y hay que evitar todo tipo de productos tóxicos. A partir del segundo trimestre sí que podrás ir pero con las condiciones que antes mencionamos: siendo tintes o mechas sin amoniaco.
Lo que llega a penetrar por la piel es algo mínimo, cuando el tinte en sí cuenta con amoniaco. De manera que al ser una cantidad ínfima no supone riesgo para el feto pero por prevenir no está de más. Ahora ya sabes que puedes elegir ambas opciones con o sin amoniaco para que te quedes más tranquila en función de la que elijas.
Opta por las medidas de seguridad
Ya lo hemos mencionado pero no está de más volver a recordarlo. Cuando las medidas de seguridad se cumplen estamos en el camino correcto. Así que en este caso, si te tiñes en casa, recuerda que debe ser en un ambiente bien ventilado. Usa siempre guantes y si puedes, también una mascarilla para evitar oler esos olores que son un tanto fuertes. El producto solo lo dejarás el tiempo mínimo que te indica en la caja y justo cuando termines debes lavarte a conciencia para eliminar todo tipo de restos.