Los bebés tosen por una variedad de razones, que incluyen enfermedades, afecciones médicas e irritaciones. Si tu bebé tose porque bebe agua o después de beberla, puede ser una reacción a la temperatura si el agua está extremadamente fría.
Una bebida muy fría puede irritar la garganta y las vías respiratorias. Además, tu bebé podría estar bebiendo demasiado rápido o tener demasiada agua en la boca, causando tos. Este puede ser especialmente el caso si tu bebé bebe agua de una taza para sorber acostado o con la cabeza inclinada demasiado hacia atrás.
Causas de la tos al beber agua
Cuando un bebé tose, puede dar miedo, pero por lo general no es un signo de una enfermedad o afección grave. De hecho, la tos es beneficiosa porque ayuda a proteger las vías respiratorias de tu bebé. La tos puede ser causada por asma o una infección bacteriana o viral. Si un bebé supera la tos causada por una enfermedad, ciertos irritantes en el ambiente pueden agravar temporalmente la tos, como el aire frío, los olores fuertes o la caspa de mascotas. El agua muy fría puede agravar la tos que su bebé ya tiene y no tener nada que ver con la bebida.
Determinando el problema
Si el agua provoca un ataque de tos en tu bebé, trata de determinar la razón de su irritación. Si el agua está demasiado fría, asegúrate de que el agua que está bebiendo tenga al menos temperatura ambiente en el futuro. También asegúrate de que no esté recostado o inclinando la cabeza hacia atrás cuando esté bebiendo para no tener tragos gigantes que le provoquen arcadas y tos. Si no estás seguro de por qué está tosiendo y parece que está enfermo, llama a tu pediatra.
Cuidado con los medicamentos para la tos de venta libre
Estos medicamentos pueden tener efectos secundarios peligrosos cuando se administran a bebés y niños menores de 2 años. Además, muchos sitios recomiendan el uso de mezclas de miel para calmar la tos, aunque nunca se debe dar miel a los bebés (bebés menores de 12 meses) para prevenir el botulismo infantil.
La tos de tu bebé después de beber agua probablemente no sea grave, pero llama a tu pediatra si tiene problemas para respirar o respira muy rápido; tiene coloración azul en los labios, lengua o cara; su tos se acompaña de fiebre alta; o si está jadeando.