Perder sus objetos personales puede ser todo un problema para ellos y para nosotros. Porque a la larga nos va a salir un poco caro además de ser frustrante para nosotros pero también para los peques. Así que, si ves que esto comienza a ser frecuente, debemos prestar más atención a las causas por las que puede ocurrir y ponerle freno cuanto antes.
Así que, te dejamos con algunos pasos importantes que puedes llevar a cabo para que todo esto cambie. Sabemos que el tiempo siempre nos va a dar la razón pero mientras no llega, debemos tomar cartas en el asunto y apostar por poner en práctica todo lo que sigue, que no es poco. ¿Estás preparado o preparada para ello?
Presta atención al estrés infantil
Cierto es que no siempre es uno de los motivos para perder sus objetos personales pero debemos comenzar por ello. Porque si bien el estrés puede suponer toda una carga para nosotros durante el día a día, para los más pequeños todavía más. Es el momento de descubrir si están pasando por una mala época en el colegio, con sus compañeros o incluso en casa, que haya podido cambiar en su comportamiento. Ya que cuando tenemos otras muchas cosas en mente, es habitual que nos despistemos más de la cuenta. Así que, si es así, entonces debemos resolver el problema lo antes posible, si lo hay.
Ayúdale a tener más responsabilidad
Desde pequeños debemos enseñarles a ser más responsables. Quizás no es una tarea muy sencilla, pero lo irán descubriendo poco a poco y esa siempre es una buena noticia. Para dar pasos seguros debemos darles más responsabilidad como el dejar que tome más decisiones, que sepa cuáles son las normas y el buscar sus fortalezas para intentar que saquen su potencial. Otra de las mejores maneras para que tengan más responsabilidad es asignándole algunas tareas de cada día, que no presenten mayor dificultad.
Anota todo en una pizarra
Tener todo bien organizado comienza por anotar las cosas. Así que, lo mejor es tener una pizarra, un corcho o un gran horario situado en una parte de la habitación. Porque de este modo podemos ir anotando las clases, las actividades y además, todo lo que llevaremos en cada momento. De ahí que cada noche le podemos dar un repaso con los peques para que sepa qué es lo que tiene que llevar, qué libros o cuadernos necesita y mucho más. Es cierto que a veces se nos puede olvidar algo, porque son muchas las horas, las clases o las actividades extraescolares que tienen nuestros hijos. Pero con un esquema bien organizado seguro que habrá un cambio positivo en ellos.
Memorizar la rutina
No es que tengan que memorizarlo todo a modo de estudio pero sí los pasos. Es decir, intenta que cada día dejen las cosas en el mismo sitio, para que así si se despistan puedan volver al mismo punto. Hay que recordar que muchas veces es importante la repetición, porque solo así conseguiremos volverlo una rutina y que, de manera inconsciente, quede grabado siempre en la memoria. Ya verás cómo poco a poco lo irán integrando a su día a día, solo hay que tener un poco de paciencia.
Anota su nombre en sus pertenencias para evitar perder sus objetos personales
Es cierto que no se trata de una ayuda directamente para los peques, pero por otro lado sí que nos ayudan a nosotros a que todo lo suyo pueda recuperarse. De ahí que además de los pasos anteriores, siempre podemos echar un cable a mayores y en este caso es una buena idea el anotar los nombres. Ya se trata de algo que han hecho nuestras madres y ahora nos toca a nosotros. Por lo que tampoco nos pilla de sorpresa pero desde luego siempre es una de esas tradiciones que no deben pasar de moda. Claro que cuando los hijos van creciendo ya no querrán llevar sus nombres grabados, por eso, debemos de seguir con los consejos anteriores y esperar a que den sus frutos.