Los niños necesitan entender por qué es importante que tengan modales apropiados en la mesa y en cualquier otro momento de sus vidas. Es más probable que los niños recuerden los modales y las reglas de etiqueta específicas cuando les das una breve explicación sobre por qué un comportamiento en particular se considera descortés o grosero.
Evita dar largas charlas y contar cuentos con demasiados detalles. En lugar de esto, simplemente indica la razón por la cual un comportamiento específico no puede ser apreciado. Por ejemplo, si tu hijo está masticando con la boca abierta dile algo del tipo: “La gente no quiere ver la comida en tu boca cuando estás tratando de comer”. De esta manera y con esta indicación tu hijo se dará cuenta de que debe comer con la boca cerrada y hará que este comportamiento se vuelva consciente.
Comenta a tu hijo de forma calmada y objetiva que si tiene los modales en cuenta, las demás personas apreciarán su esfuerzo por tener una buena educación en la mesa o en cualquier otro contexto.
Expectativas apropiadas a su edad
También es necesario tener unas expectativas adecuadas a su edad, porque tampoco puedes esperar unos modales estupendos en niños de 3 años. Tienes que asegurarte de que tus expectativas son apropiadas para la edad y el nivel de desarrollo de tu hijo. Puedes comenzar a trabajar con un niño pequeño en los conceptos básicos como decir «por favor», «gracias» y «lo siento”.
Para cuando tu hijo sea un adolescente, debes concentrarte en habilidades avanzadas como guardar el teléfono en situaciones sociales y habilidades de comunicación más complejas. A veces es útil concentrarse realmente en un área a la vez, como los modales básicos de la mesa, antes de pasar a otras habilidades. Si le exiges mucho aprendizaje a tu hijo de una vez, puede sentirse abrumado y no avanzar. También es común que las habilidades se revisen de vez en cuando para asegurarse de que tu hijo recuerde usarlas.