No dejes que la enfermedad celíaca afecte el desarrollo de tu hijo

Niña comiendo de todo

Como ya explicábamos aquí hay varios tipos de trastornos relacionados con el gluten: la enfermedad celíaca (el que más conocemos), y además la sensibilidad al gluten no celíaca y la alergia al trigo. Hoy nos vamos a ocupar sólo de la celíaca, y es que como bien sabréis, este trastorno tiene una incidencia bastante elevada; y es sufrido con más frecuencia que antes.

Es mayor también el porcentaje de personas que siguen dieta sin gluten (por iniciativa propia o tras diagnóstico).

En cuanto a la enfermedad celíaca, se trata de una afección crónica que provoca una afectación al intestino delgado al ir destruyendo las vellosidades intestinales. Esta situación provoca una deficiencia de nutrientes por malabsorción, y en los niños, uno de los efectos más directos es insuficiente aumentos de peso.

Es por lo tanto preocupante, en especial hasta el primer diagnóstico, ya que las familias buscan respuestas a un crecimiento y desarrollos lentos.

Información útil sobre el gluten y la enfermedad celíaca

Adolescentes comiendo hamburguesas

El gluten es una proteína que contienen los cereales más habituales con los que se fabrican panes, pastas y productos de bollería. Ello incluye el trigo, la cebada el centeno, la avena (en proporción menor); y otros como la espelta o el mijo. Y excluye el arroz y el maíz, con los que se producen los productos aptos para celíacos.

Si tenéis cerca algún niño con enfermedad celíaca, sabréis que los síntomas son variables, en función de algunos factores, pero especialmente la edad. Por ejemplo adolescentes y niños más grandes podrán sufrir estreñimiento o dolor abdominal; y también otros no intestinales como anemia, sarpullido, baja estatura en la etapa puberal, incluso osteoporosis.

Y en los niños más pequeños se observará crecimiento insuficiente, o diarrea crónica y gases intestinales. Se empezará a notar a partir de la introducción de la alimentación complementaria, si esta incluye gluten. Es muy importante reconocer y tener en cuenta que hay algunos peques que son asintomáticos, y se descubre por análisis de sangre.

Hay algunas enfermedades asociadas a riesgo de sufrir enfermedad celíaca, y en estos casos se deberían realizar pruebas de determinación, por ejemplo:

  • Síndrome de Turner.
  • Tiroiditis autoinmune.
  • Diabetes tipo 1.

Son sólo 3 ejemplos; y desde luego tener hermanos  o padres con esta enfermedad se considera un factor predisponente.


¿Y qué hay de las causas de esta enfermedad?

Son desconocidas, si bien el trastorno podría estar relacionado con enfermedades como el Síndrome Williams o la deficiencia selectiva de la immunoglobulina IgA, además de las mencionadas arriba (entre otras); como se sabe también puede aparecer sin relación con ellas.

Para diagnosticarla es preciso realizar análisis de sangre para determinar nivel de anticuerpos, y lo más probable es que con resultados positivos, también se prescriba una biopsia. Es importante entender la importancia del diagnóstico, porque una persona celíaca que continúe tomando gluten seguirá sufriendo daños en su sistema digestivo.

El cuidado de un niño con enfermedad celíaca

Niño pequeño comiendo

Desde el momento en que se diagnostica, es necesario adoptar una dieta estricta sin gluten; y sin contaminación cruzada. Se aconseja atender las recomendaciones del etiquetado, y ser consciente de que también puede haber gluten en productos no alimenticios como cosméticos.

A continuación, presentamos una pequeña relación de alimentos procesados que deberéis evitar:

  • Preparados para masas de todo tipo, incluyendo crepes o bizcochos (a no ser que explícitamente se mencione que son aptos para personas con celiaquía).
  • Alimentos empanados en la sección de congelados.
  • Frutos secos, aunque también existen «sin gluten».
  • Salsas (leer etiquetado).
  • Caldos, cremas, sopas, purés (revisar bien la etiquetas).
  • Fiambres procesados.
  • Productos «sin trigo» (pueden contener el gluten del centeno o la cebada).

Salir a comer fuera de casa

Es relativamente sencillo cuando el personal del establecimiento está preparado para informar sobre los ingredientes, y especialmente cuando el menús ofrece menús específicos «sin gluten». Existen grandes cadenas de restauración en comida rápida familiares, que ofrecen esta posibilidad, y cada vez más negocios familiares que incorporan la diversidad.

Se puede recurrir a platos básicos como ensaladas o combinados (sin rebozados), también a guisos caseros o arroces. Pero siempre debemos ser conscientes de la posibilidad de contaminación cruzada, y preguntar (por ejemplo) si el aceite de freír las patatas es el mismo que el de las croquetas rebozadas.

Es tan importante cuidar la alimentacion de un niño celíaco, como entender que un pequeño error no resulta tan determinante para la salud como podemos pensar a priori: la inflamación desaparecerá en cuestión de días.

Para finalizar, mencionar que es todo un reto para un pequeño realizar todos los ajustes necesarios, por lo que también vamos a necesitar la colaboración de familiares o amigos.


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