Hay padres que siguen la corriente a otros padres o familiares cuando les dicen qué deben hacer o cómo hacerlo en cuanto a sus hijos. Les siguen la corriente simplemente para no entrar en conflictos con ellos, les dicen que sí, pero después hacen lo que piensan que es mejor en la crianza de sus pequeños.
Esto te ayuda a ahorrar energía y creatividad para tus hijos, sin necesidad de tener que tolerar comentarios de otras personas. Los japoneses no pierden el tiempo tratando de descubrir por qué ocurrió el problema o a quién culpar, se concentran en la solución… ¡gran lección para todos! Por eso, dedica tu energía a lo que puedes cambiar y donde puedes marcar la diferencia, no donde no puedes.
Una de las cosas más difíciles para los padres de niños con necesidades especiales o sin ellas, es lidiar con las críticas de las personas que valoran y que más quieren. Los padres puede lidiar con sentimientos de culpa, algunos piensan que no son buenos padres y que por esos su hijo es cómo es, pero de eso nada.
Lo que es importante es que las críticas de los demás no lo tomes como un ataque personal, si te sirven para reflexionar está bien, pero si no son constructivas y son más destructivas que otra cosa, entonces es mejor que ni las escuches. Tu hijo no es bueno ni malo, solo es un niño que estás educando. Acércate más a las personas que te muestran su afecto y que sus comentarios te ayudan a ser mejor persona y mejor padre o madre. No te identifiques con las malas palabras, y si alguna vez te sientes desorientado en la crianza de tus hijos, entonces pide ayuda a un profesional que te oriente con pautas educativas para aplicar en tu hogar, tanto para los padres como para los hijos.