Se va acercando el momento de parto y es ahí cuando la mezcla de sentimientos hace que nos pongamos más nerviosas. Por un lado estamos deseando tener a nuestro bebé en brazos pero otro, está el temor ante el parto y sus dolores. De ahí que tengamos que mencionar el parto con epidural así como sus ventajas y alguna que otra desventaja.
La epidural es una anestesia que va a aliviar los dolores en el momento del parto, al mismo tiempo que la futura madre puede estar despierta y participativa en todo momento. Aunque surgen siempre muchas dudas en torno a ella, y no todo el mundo cree que sea algo positivo, vamos a ver sus dos caras. ¿Y tú qué opinas? ¿Parto con epidural o sin ella?
Las ventajas del parto con epidural
La epidural es una de las grandes alternativas que tenemos hoy en día. Es cierto, que como hemos mencionado, son muchas las personas que están en su contra por varios motivos. Aún así, siempre se generan una serie de dudas a su alrededor, por lo que es mejor hablar claramente con tu médico antes de este momento. Ya que solo así dejarás atrás dichas dudas pero también los nervios principales que te pueden jugar malas pasadas. Dicho esto, vamos a ver las ventajas del parto con epidural porque son muchas.
- Una de las grandes ventajas a destacar es que la madre está consciente durante todo el proceso y puede vivirlo de una manera más intensa. Ya que es uno de esos momentos que nunca se borrarán. Además de poder participar en todo lo que los médicos indiquen.
- Se puede ajustar la dosis en el caso de que el dolor intenso aparezca. Por lo que siempre será de gran ayuda para que el trabajo de parto siga su curso pero de manera menos dolorosa.
- Por regla general, la futura madre sí siente las contracciones pero no con ese dolor intenso. Sino que podemos decir que se trata de una presión fuerte pero no dolorosa.
- En caso de llegar a tener que realizar una cesárea, la madre puede seguir estando participativa en todo momento.
- No es necesario aplicar ningún otro medicamento a la hora de realizar la episiotomía o de necesitar la ayuda de los fórceps.
- La epidural también reduce el esfuerzo en la madre. Esto hace que aquellas mujeres que tengan problemas de tipo cardíacos o pulmonares les ayudará todavía más a controlar dichos órganos.
- Reduce la presión sanguínea.
Cuáles son las desventajas de la epidural
Si hemos visto una cara, ahora le toca a la segunda. Porque también la anestesia epidural puede tener una serie de desventajas que necesitas conocer.
- La última parte del parto suele ser más lenta. Esto nos indica que será en ese momento donde la madre tiene que ir realizando lo que los médicos le indican, porque hay una ligera pérdida de fuerza muscular.
- El dolor de cabeza es uno de los síntomas que puede aparecer tras la epidural como efectos secundarios, al igual que algunas náuseas.
- La tensión baja también puede ser otra de las desventajas, pero en este caso, se podrá controlar manteniendo a la madre con suero y bien hidratada.
- Puede ser más frecuente el uso de fórceps.
- También en ocasiones, puede que el efecto no sea tan eficaz como pensamos, pero lógicamente ya hemos comentado como se puede ajustar la dosis.
- Se habla mucho de los riesgos que tiene la epidural, pero hay que mencionar que la gran mayoría de ellos son sumamente raros. El daño a las raíces nerviosas es algo muy poco frecuente, así como la infección. El dolor de cabeza muy intenso puede aparecer en una de 25 mujeres y lesiones graves, en una de cada 300.000 mujeres.
Entonces, ¿Parto con o sin epidural?
Siempre habrá una división de opiniones y es algo lógico. Pero lo buen es que podemos decidir, a no ser que el parto esté muy adelantado. De ahí que siempre es bueno hablar a lo largo del embarazo con tus médicos para ir resolviendo siempre las dudas y para que puedan adaptar las respuestas a tus circunstancias personales. A modo de resumen, el parto con epidural tienen más ventajas que desventajas. ¡Tú decides!