¿Por qué aparecen hongos en la piel?

hongos en la piel

Las micosis son infecciones de la piel causadas por hongos, es decir, microorganismos que se nutren de los tejidos orgánicos en los que viven.En concreto, los hongos crecen alimentándose de la queratina (es decir, la proteína que compone la piel, el cabello y las uñas) presente en las células muertas de la piel, lo que suele provocar picor y la formación de manchas en la piel.
Los diferentes tipos de micosis cutáneas varían según el hongo implicado (las micosis más comunes incluyen el pie de atleta , la tiña y las infecciones por levaduras), distinción que se refleja en la elección del tratamiento a seguir.Exploramos algunos aspectos de este problema con la Dra. Elena Bruni, especialista en Dermatología y Venereología del Instituto Dermoclínico Vita Cutis del grupo hospitalario San Donato. Esto es lo que la doctora cuenta.

¿Qué son los hongos en la piel?

Las micosis cutáneas son infecciones sustentadas por hongos patógenos, que se desarrollan, precisamente, a nivel de la piel. Más concretamente, estas infecciones suelen afectar a las capas queratinizadas de la epidermis y anejos cutáneos (uñas, pelo y cabello).

Los hongos responsables de la aparición de micosis cutáneas se definen como dermatofitos y pertenecen esencialmente a tres géneros diferentes: Microsporum, Epidermophyton y Trichophyton.

¿Cómo podemos saber que tenemos un hongo en la piel?

Las micosis aparecen en la piel como parches escamosos con bordes ligeramente engrosados. Los parches tienen forma circular y tienden a extenderse como la pólvora. Comienzan como si fuera un grano y crecen gradualmente hasta unos pocos centímetros de diámetro. Afectan principalmente las áreas descubiertas y expuestas.

Los síntomas de las micosis cutáneas pueden ser diferentes según el sitio donde se desarrollen. Sin embargo, entre los diversos síntomas que pueden presentarse, son muy comunes los que os nombro a continuación: picor, descamación de la piel, formación de pus, alopecia (cuando la infección fúngica afecta al cuero cabelludo), formación de máculas, discromía cutánea, eritema, engrosamiento de las uñas (si la infección por hongos afecta las uñas ) y ampollas en la piel.

¿Por qué aparecen los hongos?

Esta condición es causada por un grupo de hongos que se alimentan de las células de la piel. Pueden ser transmitidos a los humanos por animales infectados (por ejemplo, perros y gatos), aunque es lo menos común. Por lo general, la infección suele producirse de humanos infectados a humanos sanos, por contacto directo o por contacto con obejos que haya tocado el hongo de la persona infectada. Por eso es tan común que en lugares como duchas o piscinas, donde hay calor y humedad, se pasen loshongos de unos a otros.

¿Qué tratamientos se pueden usar contra los hongos?

Existen terapias tópicas a base de antifúngicos en crema que son muy eficaces, pero a la vez son tratamientos lentos. A veces, siempre que el médico lo crea oportuno, puede ser necesaria la terapia oral con antifúngicos. Si se elige bien la terapia más adecuada y se sigue a raja tabla, se puede llegar a curar la infección en cuestión de un mes. Las lesiones pueden resolverse por completo, dejando manchas en la piel más claras o más oscuras que van cambiando de color gradualmente con el paso de los días.

Siempre que haya duda de una micosis es recomendable realizar un examen dermatológico con posible examen micológico hecho con un microscopio y con una prueba de cultivo. De esta forma se puede llegar a saber con mayor precisión el tipo de hongo que está afectando la piel. De esta forma será posible llevar a cabo un tratamiento más específico y eficaz, haciendo que el tratamiento dure menos tiempo y no vuelva a aparecer.

¿Se pueden llegar a prevenir las infecciones por hongos?

Para reducir el riesgo de contraer una infección por hongos es recomendable adoptar una serie de precauciones como:

– secarse bien la piel después de bañarse o ducharse;

– lavar regularmente la ropa interior, la ropa y las sábanas;

– llevar siempre zapatillas en las zonas comunes, como duchas, saunas y piscinas;

– elegir que no sea demasiado ajustada en algodón o materiales transpirables;

– evitar compartir toallas, cepillos o peines;

– alternar los zapatos cambiando de par cada dos o tres días, para darles el tiempo necesario para que se sequen.


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.