La Navidad está a la vuelta de la esquina y con las fiestas navideñas, llegan también las vacaciones escolares para los niños. En este primer periodo vacacional, los niños disfrutan de las fiestas, de las comidas y los eventos familiares y cómo no, de los regalos. Es quizá por este motivo por el cuál, les suele costar más de la cuenta volver a la normalidad y superar el primer día de clase. Algo lógico teniendo en cuenta todos los juguetes y regalos nuevos que les esperan en casa.
Por este motivo, es muy importante que los niños no pierdan la noción de la etapa escolar que están viviendo. De lo contrario, podrían volver a pasar unos días de adaptación igual que ocurre al comienzo de las clases. Para evitar que esto ocurra, debes tener en cuenta algunas claves y evitar problemas el primer día de clase.
Recordar que las vacaciones son temporales
Los niños más mayores son conscientes de que las vacaciones son periodos temporales, pero los más pequeños, no alcanzan todavía a esa comprensión. Por lo tanto, para ellos es muy difícil entender que durante unos días van al colegio o al centro infantil, y otros no. Aunque tus hijos sean muy pequeños y creas que no lo van a entender, es muy importante que les recuerdes cada día de las vacaciones que esos días en casa son solo por las vacaciones.
Poco a poco irán comprendiendo ese concepto y les resultará más fácil adaptarse a esos periodos de cambios. Algunos niños sufren bastante con el descontrol que supone el cambio de rutinas, por lo que es esencial no romperlas por completo.
Mantener las rutinas
Mantener las rutinas que ya se han establecido durante este primer periodo escolar, es muy importante para que la vuelta al cole no suponga un problema. Durante los días de vacaciones, procura que los niños respeten sus horarios de los días de clase. Si mantienen las rutinas de las comidas, del baño, de juegos y de sueño, les será más fácil volver al colegio sin acusar ese cambio de hábitos que se suele hacer en vacaciones.
Los días más importantes de la Navidad se romperán todas las rutinas, pero más allá de esos días, los niños deben mantener una planificación diaria.
Trabajo diario
También es muy importante que los niños realicen un trabajo diario, para mantener la rutina de estudio. Los más pequeños tan solo tendrán que hacer algunos dibujos y manualidades para mantener el ritmo. Los mayores también pueden adaptar sus trabajos a la Navidad, además de hacer las tareas o lecturas que les hayan mandado en el colegio.
Para aprovechar la temática y que los niños no sientan que están perdiendo las vacaciones haciendo tareas, lo ideal es que sus trabajos estén enfocados a la Navidad. Por ejemplo, pueden crear ellos mismos los regalos que quieran hacer a sus amigos y familiares en Navidad. Serán unas manualidades muy coloridas y bonitas, además los niños trabajarán su creatividad, un punto esencial en su desarrollo.
Prepara el primer día de clase
No te olvides de preparar emocionalmente a los niños para el primer día de clase, así no se llevarán una sorpresa (quizá desagradable). Habla con los niños y explícales que volver al colegio significa volver a ver a sus compañeros y amigos. Con ellos podrán jugar con todos esos juguetes nuevos y revivir todos los momentos especiales que han vivido durante las navidades.
Es muy importante que les transmitas un mensaje de felicidad por volver al colegio, por ver a sus amigos y a sus profesores. De esta forma, los niños no sentirán el final de las vacaciones como algo negativo, si no como una nueva oportunidad de aprender muchas cosas, disfrutar de los compañeros y de todo lo que el colegio les ofrece.
Así además, tú misma asimilarás el mensaje con optimismo, ya que volver al trabajo después de las vacaciones no es fácil para nadie. Especialmente después de haber estado unos días con los niños, disfrutando de la familia y de los días de vacaciones. Volver a la rutina, significa que ya queda menos para las siguientes vacaciones, aprovecha ese sentimiento positivo que les vas a transmitir a tus hijos.