A partir de los 18 meses, los niños ya van adaptando su dieta a la de las personas mayores. No hay que dejar de ir introduciendo alimentos nuevos, con sabores y texturas que puedan adaptarse a su edad. Comentaremos qué comen los bebés de 18 meses para seguir una dieta correcta sin dejar de lado los alimentos que antes seguía.
Los niños con 18 meses todavía pueden seguir tomando leche materna, algo que no pueden dejar de lado si la madre lo permite. Por otro lado, sus estómagos son pequeños y adaptarlos a una dieta mucho más completa no equivale a tomar la misma cantidad que la de una persona mayor. Es importante crear una rutina de especial, dónde no deben aplicarse dulces, leches saborizadas, refrescos o zumos con jugos.
Índice
La dieta de un bebé de 18 meses
El niño comienza a tomar más autonomía. Seguramente ya haya comenzado a comer con sus propias manos y a utilizar algún cubierto. Hay que dejarle a su ritmo, que maneje los cubiertos con destreza y utilice los vasos adaptados. Se puede supervisar el momento para corregirlo, pero sin regañar, ya que tiene que tomar su propia iniciativa. Es muy buen proyecto disponer de varios alimentos y dispensarlos por la mesa, para que decida que picotear y pruebe sus sabores y texturas.
El bebé o niño a esta edad puede tomar prácticamente de todo. Todos los alimentos les pueden tolerar y aplicar a su dieta, comenzando a comer como el resto de la familia. Ahora ya es momento de dejar los alimentos triturados e ir incorporando los semisólidos y sólidos. Comenzará a masticar, salivar y deglutir los alimentos.
Cómo realizar una dieta y distribuir los alimentos
Como hemos reseñado, los bebés de 18 meses comen prácticamente de todo, incluida la misma dieta del resto de la familia. No obstante, se puede hacer un seguimiento y valoración de los mejores alimentos que se pueden seguir para su dieta.
Los pediatras recomiendan tomar proteínas (carne y pescado) junto a las verduras y algo de carbohidratos. Esto se destina principalmente en las comidas y cenas, dejando los lácteos y frutas para los desayunos y meriendas.
- Por ejemplo, se ofrece hasta dos o tres veces a la semana pescado acompañado de verdura o hidratos como arroz, pasta, patata…
- Otras dos veces a la semana ofrecer legumbres con algo de carne para las comidas.
- En las cenas se repite carne o pescado, aunque también admite otro tipo de proteínas como el huevo en forma de tortillas o revueltos.
- En las meriendas se puede ofrecer fruta, zumos naturales, quesitos, pequeños bocadillos o lonchas de jamón york, pavo.
¿Qué ocurre con la leche?
La leche es el principal alimento en la dieta de un niño durante su crecimiento. A los 18 meses sigue tomando leche, en este caso, ya puede introducir leche normal. Si todavía sigue tomando leche materna, no hay problema que lo complemente a su dieta, será algo excepcional. El niño ha de tomar medio litro de leche al día, si no hay suficiente leche materna lo puede completar con la leche de vaca.
La leche es un alimento muy completo, ya que aporta calcio y vitamina D, esenciales para unos huesos fuertes. Es importante que la leche que tome sea entera, pero si el niño tienen problemas de sobrepeso u obesidad, puede tomar leche semidesnatada, siempre que sea prescrito por un pediatra. Los niños a partir de los 2 años ya pueden tomar leche descremada.
Si su hijo presenta intolerancia a la leche de vaca puede tomar leche de soja, siempre que esté enriquecida con calcio y vitamina D. Puede tomar otras alternativas, como la leche de coco, arroz, avena o almendras. Es preferible que no contengan nada de azúcares.
Es preferible que los biberones deje de tomarlos y vaya imponiendo los vasos a las tazas. Se puede ir implantando este método poco a poco, deberán de ir reemplazando los biberones de la hora de comer para tomarlos en vaso. Los desayunos los puede tomar en tazas grandes comedidas a su tamaño de manos.
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