El labio leporino es una malformación que provoca una hendidura en el labio superior del bebé que puede extenderse hasta la nariz. Podría pensarse que es un problema meramente estético pero dependiendo de su profundidad podría el día a día del bebé de diversas formas.
El bebé nace con labio leporino cuando las estructuras faciales se desarrollan de manera incompleta. Es uno de los defectos de nacimiento más frecuentes y en ocasiones puede ir asociado a otro como paladar hendido. ¿Quieres saber que supone para el bebé y a partir de que edad puede corregirse? Te lo contamos todo.
¿Qué es el labio leporino?
El labio leporino se encuentra entre las afecciones congénita más frecuentes. Surge en la gestación, es decir, durante la formación del feto, cuando las estructuras que forman el labio superior y paladar de la boca no se desarrollan correctamente y como resultado el niño nace con una hendidura o espacio en el labio superior.
Durante los primeros días de desarrollo del feto esa hendidura entre el lado derecho y el lado izquierdo del labio y la parte superior de la boca o paladar, es una realidad. Sin embargo, entre las semanas 6 y 11 del embarazo, según se ha podido saber, esta separación desaparece al unirse ambas partes para formar los labios y la boca. Cuando esa fusión no se desarrolla correctamente pueden desembocar en un labio leporino y/o paladar hendido.
Esta afección puede presentar diferentes formas. En algunos casos la hendidura es pequeña y solo afecta al labio. En otros, los mas graves, la división es grande, afecta a ambas partes del paladar y puede extenderse hasta la nariz con graves consecuencias para el niño.
Tanto el labio leporino como el paladar hendido suelen detectarse durante la exploración de anomalías a mitad del embarazo, entre las semanas 18 y 21 del embarazo. Sin embargo, algunas veces la afección no es obvia en la gammagrafía y en esos casos no será hasta que nazca el bebé cuando será diagnosticado.
Consecuencias negativas
¿Qué consecuencias tiene o puede tener el labio leporino en los bebés? Dependerá, como ya hemos mencionado, de las características de la afección y de si está o no asociada al paladar hendido. Los problemas mas frecuentes son los siguientes:
- Estéticos: No hay que menospreciar los problemas estéticos que puede causar en el bebé un labio leporino hasta que este se corrige. Actualmente es una afección que se trata mientas aun son bebés pero si la restauración no es completa, conviene trabajar en su confianza y proporcionarle otras herramientas para que una malformación así no deje huellas sicológicas.
- De alimentación: El bebé podría tener dificultades con la lactancia materna o con el biberón, lo que podría provocar problemas para alimentarlo.
- Problemas dentales: Debido a la malformación, los dientes del niño podrían no desarrollarse correctamente y sufrir mas problemas.
- Problemas de habla: Si la cirugía no consigue arreglar el labio leporino y el paladar hendido, el habla se puede ver afectada.
- Problemas auditivos: algunos bebés con labio leporino o paladar hendido tienen un mayor riesgo de infecciones de oído y oído pegajoso, lo que puede afectar la audición.
¿Cómo se corrige y se trata?
La solución para un labio leporino y/o paladar hendido suele pasar por una cirugía en la que se unirá el tejido para cerrar la hendidura. La cirugía se realiza, generalmente, cuando el bebé tiene entre tres y seis meses. Hay que esperar, sin embargo, algo mas si esta malformación está asociada a la del paladar hendido, hasta los seis o incluso doce meses.
Además de la cirugía, necesaria en una gran mayoría de casos, los médicos suelen trazar un plan de cuidados para que los padres puedan proporcionar a los mas pequeños todo aquello que pudieran necesitar a medida que crecen como: Apoyo para la alimentación, controles de la audición, tratamiento de infecciones de oído, terapia del habla y del lenguaje y7o tratamiento dental y/o ortodóntico.
¿Sabías el por qué del labio leporino?