Como hemos mencionado en muchas de nuestras publicaciones sobre bebés, el llanto de estos es un medio para comunicarnos que algo en ellos no está bien. En muchas ocasiones, estos llantos se vuelven frecuentes y temidos por parte de los padres ya que, no saben cómo acabar con él. Uno de esos temidos llantos, es el que tiene que ver con el cólico del lactante, por lo que muchos se plantean la pregunta de, cómo pueden aliviar ese llanto producido por el reflujo en su bebé.
Para poder acabar con este problema de una vez por todas, es el saber identificarlo y ponerle el mejor remedio posible. Por eso desde Madres Hoy, queremos ayudarte con este tema y darte una serie de consejos para que este proceso sea mucho más llevadero para vosotros como padres y, para el pequeño de la casa.
¿Qué es lo que produce el reflujo en los bebés?
El reflujo del lactante, es producido por una incompetencia para cerrar el orificio de entrada que los pequeños tienen en su estómago e impedir la subida del alimento. Como sabéis, todas las personas en el estómago tenemos un agujero de entrada y otro de salida. Al quedar este orificio abierto en su totalidad o parcialmente, el alimento tiende a subir por el esófago del bebé, llegando a la zona superior y provocándole regurgitaciones.
En principio, esta afección no debe suponer una preocupación para los padres, ya que es algo común entre los bebés. Hay ciertas circunstancias, que aumentan la aparición del reflujo en los más pequeños como puede ser el ser prematuro o algún tipo de enfermedad. En caso de padecer alguno de estos casos, es recomendable acudir al centro médico para una evaluación y diagnóstico.
Síntomas de reflujo en el bebé
Cuando el reflujo es algo evidente en los más pequeños de la casa, es muy fácil de identificarlo debido a regurgitaciones continuadas. En caso de no saber diferenciar, ni actuar en estos casos, os dejamos a continuación una serie de pistas sobre ello.
- Es de lo más común, que el bebé aparezca con sus ropas húmedas o incluso mojadas en su totalidad.
- Un síntoma que nos pueda poner en alerta, es la excesiva irritabilidad del bebé. Puede sentirse incómodo y molesto de forma continuada.
- El disconfort digestivo también en síntoma de alarma ya que, no solo se presenta dicha irritabilidad sino que vienen acompañado de llantos estridentes y sonidos de garganta.
La aparición de regurgitaciones, es solo la primera fase que se puede observar de la afección que estamos hablando. En caso de que continúe esa irritación de las mucosas del esófago, es importante acudir a un especialista.
¿Cómo aliviar el reflujo en los bebés?
Es natural, que los progenitores o tutores de los bebés quieran hacer todo lo que esta en sus manos para que su pequeño se encuentre mejor. Por eso, buscan todo tipo de soluciones para acabar con el malestar producido por el reflujo. A continuación, te vamos a dar tres consejos primordiales para poder acabar de la mejor manera con esta afección.
Cambios en la postura
A la hora de alimentar a tu pequeño es fundamental, ya sea con biberón o con pecho, acomodarlo en una posición en la que el bebé se encuentre ligeramente incorporado. Deberéis mantener esta posición, hasta en la hora de dormir.
Seguimiento de alimentación
Las madres al ser encargadas de darles su leche a los pequeños, debe seguir una dieta de eliminación. Con esta medida, hay que observar si el pequeño sigue con el reflujo y este se produce como consecuencia de la ingesta de determinados alimentos por parte de la progenitora.
No recomendado el uso de accesorios
Son muchos, los accesorios que podemos encontrar en el mercado para el tratamiento de esta afección. Las cuñas o almohadas con unos de ellos que ayudan a la posición de dormir del pequeño pero que realmente no son necesarios.
El reflujo debe desaparecer por sí solo, por complicado que parezca. En la mayoría de los casos, los síntomas suelen desaparecer conforme el pequeño va creciendo. Cuando alcance los 6 meses de vida, esta afección tiene que desaparecer totalmente, ya que son capaces de moverse y colocarse por sí solos.
En caso de tener cualquier duda acerca del reflujo de tu pequeño, lo mejor que puedes haces es hablar con tu pediatra de confianza y confrontar conjuntamente un plan para acabar con el reflujo.