Un parto prematuro es aquel que se produce antes de la semana 37 de gestación. Ocurren entre 10-15% de los embarazos y pueden traer bastantes complicaciones. Pueden ocurrir por varios motivos, por lo que hay que estar atentos a sus señales para saber actuar cuanto antes. Hoy os hablamos de que hacer si hay riesgo de parto prematuro.
El problema de nacer antes de tiempo
Normalmente los embarazos llegados a término, suelen concluir entre la semana 37 y 40 de embarazo. Es el tiempo que necesita el bebé para terminar de formarse de forma satisfactoria y que no tenga problemas al nacer. Pero esto no siempre es posible, y muchas de las causas que lo provocan están fuera de nuestro control. Por eso es necesario saber actuar si vemos síntomas de parto prematuro y pedir ayuda lo antes posible.
Los partos prematuros ocurren antes de la semana 37, y sus complicaciones estarán determinadas por cuanto antes se produzca el parto. A menos semanas dentro de la madre más complicaciones puede haber. Estas complicaciones no solo pueden afectarle al nacer, sino que pueden afectarle más adelante en su vida. Tiene menos probabilidades de sobrevivir, riesgo de sufrir retraso mental, parálisis cerebral, problemas respiratorios y digestivos, pérdidas de audición y visión, retrasos en el desarrollo y aprendizaje entre otros problemas.
¿Cuáles son las señales de parto prematuro?
Hay ciertos síntomas que pueden indicar que puede estar ocurriendo un parto prematuro:
- Cambio en el flujo vaginal. Si notas que tu flujo se vuelve de color sanguinolento o de color marrón.
- Hemorragia vaginal.
- Contracciones uterinas regulares y frecuentes, con o sin dolor.
- Rotura de la bolsa de aguas.
- Dolor de vientre.
- Cólicos abdominales que pueden ir acompañados o no de náuseas.
- Dolor leve y constante en la espalda baja.
Si sientes alguno de estos síntomas acude a tu centro de salud para que te examine un médico. Te hará un examen pélvico o de ultrasonidos para ver en qué estado se encuentra el cuello uterino. Cuando comienza el proceso de parto comienza a borrarse, lo que sería una clara señal de parto. El cuello uterino es el canal que une el útero donde está el bebé con la vagina, y por donde nacerá el bebé en caso de parto vaginal.
También te controlarán las contracciones de forma monitorizada para ver exactamente su intensidad y duración. Puede que te hagan otras pruebas para comprobar si efectivamente estás de parto o no. En caso de que así sea, normalmente se aplica un tratamiento si es posible, para detener el parto y alargar lo máximo posible que el bebé se quede dentro. También se pueden aplicar acciones para mejorar la salud el bebé si sale antes de tiempo. Será tu médico el que determinará que acciones tomar para cuidar tanto tu salud como la de tu bebé.
¿Qué puede provocar riesgo de parto prematuro?
No siempre se sabe que ha podido causar un parto prematuro. En ocasiones sucede sin que hubiera ninguna complicación anterior. Pero si que hay ciertos factores de riesgo que pueden dar más probabilidades de sufrir un parto prematuro.
- Si ya has sufrido un parto prematuro con anterioridad.
- Si estás embarazada de dos o más bebés.
- Si tienes problemas en el útero o cuello uterino.
- Tener sobrepeso o bajo peso.
- Historial familiar de partos prematuros.
- Quedarse embarazada demasiado pronto tras tener otro bebé.
Que tengas alguno de estos factores de riesgo no significa que vayas a tener si o si un parto prematuro. Simplemente es un factor de riesgo a tener en cuenta. Tu médico si tienes algún factor de riesgo te aconsejará para reducir el riesgo y te hará el control necesario para estar vigilada. Hoy en día con las nuevas tecnologías cada vez sobreviven más bebés prematuros.
Porque recuerda… no todo está bajo nuestro control y debemos aceptar que estas cosas suceden. No te sientas culpable si así ha sido por que no has hecho nada malo. Ha veces sucede sin más.