Durante el embarazo hay que tener algo cuidado con el menú diario, sobre todo con los alimentos que no están cocinados y son de origen animal. Hay multitud de dudas durante una gestación y muchas futuras madres pueden dudar en la ingesta de ciertos alimentos como el salmón ahumado.
¿Qué sucede cuando se quiere comer salmón ahumado durante el embarazo? Hay ciertos alimentos que corren el riego de contagiar a las embarazadas de una bacteria llamada listeria. Dicha bacteria se encuentra en alimentos como el pescado, la carne, la verdura, fruta, leche e incluso en el agua dulce o salada.
¿Se puede comer salmón ahumado durante el embarazo?
Hay alimentos que están contraindicados durante el embarazo. Entre ellos encontramos el pescado, sobre todo cuando se va a consumir crudo o poco cocinado. Esto es debido a que puede causar infecciones virales, parasitarias o bacterianas, potencialmente dañinas en el período de gestación.
El salmón ahumado realmente está crudo. Tan solo ha sido ahumado, dándole una proceso de cocción suave y lenta dónde se aplica olor y sabor. Este tipo de cocción no está eliminando las bacterias nocivas y por lo tanto puede llegar a ser nocivo. Además, el salmón si ha sido fabricado de forma artesanal puede contener otro problema contraproducente: el anisakis.
Este parásito o gusano puede causar una grave infección estomacal y severos problemas gastrointestinales. El anisakis no es tan dañino para el bebé, pero la listeriosis sí que puede ser un problema mucho más grave.
Pero no todo es imposible. El salmón se puede comer siempre que haya sido congelado. Este tipo de producto debe de ser tratado de esta forma para que pueda consumirse con las mismas propiedades. Al igual que otro tipo de pescado deberá de congelarse a lo largo de tres días seguidos para evitar el riego de contraer anisakis o listeriosis. Otros pescados no harían falta congelarlos si se van a cocinar a alta temperatura.
El problema de la listeria en el embarazo
La listeria se puede contraer durante el embarazo al tomar alimentos crudos o que no estén bien lavados. Esta bacteria puede ser traspasada al feto y puede desencadenar efectos muy nocivos.
La listeriosis puede llegar a ser muy agresiva, pero tampoco hay que alarmarse. La listeria es una enfermedad cada vez más poco común y se estima que la pueden llegar a contraer entre unas 11 personas por millón.
Esta bacteria puede tener consecuencias leves cuando es tomada de la madre, pero el problema lo tiene el bebé. La listeriosis puede provocar un parto prematuro o incluso la muerte fetal. El recién nacido puede llegar a estar infectado y podría tener secuelas muy importantes para su desarrollo.
Para conocer con más detalle si la madre ha sido infectada podría tener síntomas como fiebre, diarrea, dolores de cabeza y musculares. Ante tales efectos hay que acudir a un hospital para una exploración y valoración urgente.
Se puede evitar fatales consecuencias y para ello la mujer embarazada deberá de tomar una serie de medidas para no infectarse. Entre ellas deberá lavar bien las frutas y verduras, comer los alimentos bien cocinados por encima de los 70°. Se debe de evitar aquellos productos que no hayan pasado un control sanitario y es recomendable tomar lácteos que hayan sido pasteurizados.
Ventajas de comer salmón
Comer salmón es beneficioso durante el embarazo, ya que tiene múltiples beneficios que pueden ayudar al desarrollo del feto. Contiene ácidos grasos omega-3 y es indicado comerlo entre 2 y 3 veces a la semana. Ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y fortalecerá los huesos ya que mantendrá las articulaciones muy fuertes.
Tiene nutrientes que ayudan a fortalecer los ojos y el cerebro del bebé y su vitamina D es esencial para que el embarazo no termine en preclampsia o se provoque un parto prematuro. Si a la mujer embarazada le gusta comer pescado es recomendable que sea consumido aquel que tenga un bajo porcentaje en mercurio.