Los años de la adolescencia pueden ser la etapa más incómoda en la vida de una persona, y tu hijo adolescente puede estar sufriendo de inseguridades físicas. Los cambios biológicos y el inicio de la pubertad pueden hacer que un adolescente se sienta cohibido y llevarlo a evitar cualquier cosa que pueda hacer que se destaque.
¡Puede ser difícil concentrarse en mantenerse activo cuando quiere pasar desapercibido! La presión de grupo a esta edad también puede ser brutal, y tu hijo adolescente puede estar lidiando con las presiones sociales en la escuela para ajustarse a lo que actualmente se considera “genial».
Es posible que debas ayudar a tu hijo a encontrar una actividad en la que se sienta seguro. Considera las fortalezas que tiene y construye sobre ellas. Mantén abiertas las líneas de comunicación para que pueda ayudarle a resolver cualquier problema con su posible baja autoestima. Ofrece su apoyo cuando lo necesite, y asegúrale que es capaz de alcanzar el éxito.
Una vez que tu hijo se haya decidido por una actividad, tienes que asegurarte de planificar con anticipación y dedicarle tiempo. Los adolescentes a menudo están sobrecargados de tareas, actividades sociales, etc. Si haces un esfuerzo por hacer que el ejercicio sea conveniente para tu hijo adolescente, es más probable que lo vea como parte de su rutina diaria.
Los niños pequeños tienden a creer que cuanto más se esfuercen, mejor serán. Pero a medida que los niños pasan a la adolescencia, su pensamiento cambia; comienzan a creer que la habilidad es fija, que tener que esforzarse más significa que son menos capaces de hacerlo.
Obviamente, este punto de vista puede obstaculizar la motivación. Después de todo, ¿por qué esforzarse si no garantiza que lo hará bien? Recuerda recordarle a tu hijo que no tiene que ser un atleta estrella, o particularmente excepcional en su actividad elegida. Lo importante es hacer un esfuerzo y divertirse.
Sé su modelo seguir
Por encima de todo, recuerda ser el modelo a seguir de tu hijo adolescente. Los padres son el modelo a seguir más importante para sus hijos, que tienden a imitar los comportamientos de sus padres. Al practicar comportamientos saludables y adoptar sus propias fortalezas, está dando el ejemplo a su hijo a seguir, con suerte para toda la vida.