Cuando pasas el duelo de un divorcio, experimentarás una transformación que cambia la vida para siempre. Te darás cuenta, al recuperarte del trance que puedes ayudar a otras personas a que la transición del divorcio la puedan hacer de forma exitosa sin que tenga que acabar siendo un trauma.
No consiste en “sobrevivir” a un divorcio, sino, en aprender de él y que, si tienes hijos, vean en ti una transformación total para toda la vida… Sin rencores, simplemente crecimiento personal donde se cierra una etapa de la vida para dar paso a otra igual de importante o más que la anterior… aunque siempre renovada.
Todos debemos darnos cuenta de que a pesar de que suceden «cosas», aún podemos decidir cómo reaccionar ante esas cosas. Además, también podemos ser un modelo positivo para las personas que nos importan. Hemos pasado por una de las situaciones de vida más desafiantes … un divorcio. Y esperamos haber aprendido lecciones que no podríamos haber aprendido de otra manera.
Después de un divorcio de mediana edad, cuando al principio todo lo que podíamos ver era devastación, ahora nos damos cuenta de que tenemos la oportunidad de redescubrir nuestro mejor y más hermoso yo. La mayoría de nosotros hemos pasado años siendo lo que necesitábamos ser para quienes nos rodean. Ahora tenemos la oportunidad de volver a visitar lo que realmente queremos que sea nuestra vida en el futuro.
Preguntémonos a nosotros mismos:
- ¿Cuáles son mis regalos? ¿En qué soy bueno? ¿Qué me gusta hacer?
- ¿Cuales son mis metas? He ayudado a mi wasband con sus objetivos. He ayudado a mis hijos con los suyos. ¿Qué metas que tengo para mi vida ahora?
- ¿Cuáles son mis sueños? ¿Cuáles son las cosas que puedo hacer con las que solía soñar? ¿Cómo puedo hacer brillar mi luz de una manera nueva como mujer soltera?
Los pasos y las etapas de la recuperación del divorcio son tan variados como las mujeres en este viaje. Cada uno de nosotros tiene que descubrir cómo llegar a la vida que merecemos después del divorcio. Obtener ayuda es un gran paso en la dirección correcta. Intentar hacerlo por tu cuenta hace que la recuperación tarde más y sea más difícil.